Una de las criaturas más enormes del planeta ha vuelto a tierras gallegas para alimentarse. La ballena de 22 m de largo nadaba junto a un rorcual común de 18 m. Gracias al instituto Bottlenose Dolphin Research Institute (BDRI) tenemos las primeras imágenes del 2019 de estos cetáceos.

El BDRI es un centro de investigación del medio marino, dedicado al estudio y conservación de delfines, ballenas y aves marinas, así como a la formación académica de jóvenes investigadores.

A finales del año pasado también se localizaron alrededor de 3.000 delfines comunes nadando y alimentándose a la altura de Cíes. Y en el año 2017 se vieron varios ejemplares de ballena azul en las costas gallegas.