La ola de calor que la semana pasada dejó máximas por encima de los 37 grados fue un "espejismo" y en pleno junio una ciclogénesis explosiva "atípica" obligará a sacar los paraguas y a activar las alertas como si fuese invierno. La responsable de esta situación es la borrasca Miguel, que traerá fuertes vientos de más de 100 km/h y precipitaciones intensas.

Galicia será la comunidad más afectada, sobre todo la provincia de A Coruña. De hecho, MeteoGalicia ya ha activado para hoy desde las 9.00 a las 21.00 horas la alerta amarilla en el suroeste y el oeste de la provincia coruñesa, por acumulaciones superiores a los 40 litros por metros cuadrados en ese periodo. Las peores horas serán entre las 9.00 y las 15.00, franja en la que el servicio meteorológico activa también el nivel de aviso amarillo por lluvias localmente fuertes superiores a los 15 litros por metro cuadrado en una hora. En las Rías Baixas, el temporal llegará unas horas más tarde y durará menos tiempo, de forma que la alerta estará activa desde las 12.00 a las 18.00 horas.

Las provincias atlánticas no solo serán las más castigadas por las precipitaciones sino que estarán en alerta naranja por ráfagas de viento de más de 100 km/h, mientras que en el interior gallego, tanto en Lugo como en Ourense, el aviso será amarillo por rachas entre los 70 y los 80 km/h.

Una vez que Miguel atraviese la comunidad, mientras en el resto de Galicia remitirán las alertas por viento desde las 18.00 horas y por lluvias a partir de las 21.00 horas, en el noroeste coruñés seguirá soplando el viento con fuerza, con una previsión de 80 km/h sobre todo en Ortegal y Estaca de Bares, y en A Mariña lucense.

La borrasca Miguel tendrá consecuencias también en el mar, con alerta amarilla en las Rías Baixas, el noroeste de A Coruña, A Costa da Morte y A Mariña lucense por vientos con fuerza siete, que en algunos intervalos puede legar a fuerza ocho y, por tanto, con alerta naranja.

La fuerza de los vientos ha llevado a la Consellería de Educación a suspender todas las actividades en el exterior de los centros educativos de las provincias de Pontevedra y A Coruña. Como es habitual, en el que caso de que las circunstancias de la localidad donde se encuentra el centro supusiesen un riesgo superior, las direcciones podrán adoptar las decisiones oportunas sobre la supensión de las actividades extraescolares.

Además de la comunidad gallega, Asturias, Cantabria y el noroeste de Castilla y León serán otras de las zonas en las que se dejará notar el Miguel, una borrasca breve pero intensa más propia del invierno, que alcanzó la categoría de ciclogénesis explosiva, al cumplirse la condición de la caída de la presión en 18-20 hPa (hectopascales) en 24 horas.

En su cuenta de Twitter MeteoGalicia destaca que se trata de un fenómeno "inusual" en esta época del año provocada por el descenso de una masa de aire frío desde zonas polares. Desde el paso de Laura a principios de marzo no se produce una situación de tanta inestabilidad.

La borrasca pasará pronto y aunque las primeras horas de mañana viernes serán complicadas, el grueso del temporal se irá desplazando hacia el este. A partir del mediodía Miguel habrá abandonado Galicia y la situación mejorará: los termómetros registrarán un ligero ascenso y las lluvias cesarán.

El sábado será una jornada de transición con alternancia de nubes y claros, aunque la probabilidad de precipitaciones seguirá siendo elevada tanto el domingo como la próxima semana.