El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) volvió a rechazar ayer la petición realizada horas antes por los padres, la hermana y el hermanastro del tetrapléjico francés en estado vegetativo Vincent Lambert, con el fin de impedir la suspensión del tratamiento que le mantiene con vida.

La corte europea recordó en su decisión que hace sólo veinte días ya rechazó suspender la desconexión solicitada para cumplir con la sentencia del Consejo de Estado francés a favor de abandonar la alimentación e hidratación artificiales de Lambert. "Los demandantes no han presentado ningún elemento nuevo para adoptar una postura diferente", argumentó en su decisión.

Ayer, el hospital universitario de Reims comenzó a aplicar el protocolo para permitir la muerte de Lambert, después de que en abril el equipo médico decidiera poner fin a lo que considera un "ensañamiento terapéutico", tras casi once años de tratamientos.

Lambert, de 42 años, sufrió un accidente de tráfico en 2008 que le provocó un traumatismo craneoencefálico que le dejó tetrapléjico y totalmente dependiente. En 2014 su estado fue calificado de vegetativo.

El caso se ha convertido en modelo del debate sobre la eutanasia en Francia: los familiares demandantes son partidarios de mantenerle con vida porque consideran que la desconexión supone un trato inhumano o degradante, mientras que Rachel, la esposa de Vincent, cinco hermanos y hermanas y un sobrino están a favor de la desconexión.

Al hilo de esta polémica, el Papa pidió a través de un mensaje en su cuenta oficial en Twitter que no se ceda ante la "cultura del descarte". "Roguemos por cuantos viven en estado de grave enfermedad. Custodiemos siempre la vida, don de Dios, desde el inicio hasta su fin natural. No cedamos a la cultura del descarte", señaló el Pontífice.

La ministra española de Sanidad, María Luisa Carcedo, defendió ayer en París que las leyes para regular la eutanasia y los cuidados paliativos "son necesarias y complementarias" y mostró su confianza en que ambas serán aprobadas en la nueva legislatura. Para el caso de aquellos enfermos que hayan pedido su capacidad para expresarse, estará "el procedimiento de voluntades anticipadas", que la nueva legislación también regulará.