El conductor de la empresa de transporte urbano de autobús, Avanza-Zaragoza, Manuel Izaguerri Sánchez, de 58 años, que redujo al agresor de una joven, en el barrio de Miralbueno, ha asegurado que "lo volvería a hacer y, además, con los ojos cerrados". La joven R.I.R., de 23 años, resultó con heridas graves en el cuello al ser atacada presuntamente por F.M.C.C., de 34 años, quien posteriormente se autolesionó cuando el conductor de autobús, al que también hirió en una mano, intentó reducirle.

"Está claro que lo volvería a hacer aunque me costara la vida, lo tengo claro y tengo una hija y un hijo, pero me jugaría la vida, lo tengo claro", ha resaltado Izaguerri.

Izaguerri reside en el mismo barrio que la chica agredida, quien ha ido al colegio con su hija. Al saber que la joven está fuera de peligro ha asegurado que se siente "mas satisfecho aún", para reiterar que lo volvería a hacer: "Estoy muy orgulloso de haberle salvado la vida".

Manuel Izaguerri Sánchez ha relatado que sobre las 20.30 horas de ayer, cuando llegaba al terminal de la línea 53, vio que en el asiento del conductor de un coche había una chica, con las piernas ya fuera, que pataleaba y gritaba. "Pensé que le había dado un ataque de epilepsia porque al agresor no le vi, ni tampoco el 'cutter'. Eché el freno de mano, bajé y entonces le ví a él cortándole el cuello. Agarré a la chica de las piernas y de un tirón la saqué a la calzada, entonces él empezó a cortarse el cuello y lo dejé mientras atendía a la joven". En ese momento, el presunto agresor intentó agarrar a la chica por los pelos y el conductor le sujetó, momento en que recibió un corte en la mano izquierda. Acto seguido recibió el apoyo de más viandantes que le ayudaron a mantener sujeto al agresor hasta que llegó la Policía Local y le puso los grilletes, ha narrado Manuel Izaguerri.