El portero español Iker Casillas evoluciona favorablemente y sin complicaciones después del infarto agudo de miocardio que sufrió el miércoles según informó el Oporto, club en el que milita. El club divulgó un comunicado en el que explicó que Casillas "continúa internado, evoluciona favorablemente dentro de lo previsto y sin ningún tipo de complicación", sin dar más detalles.

Nelson Puga, jefe de los servicios médicos del Oporto, dijo ayer que Iker Casillas pudo superar su infarto sin que le queden secuelas, pero subrayó que es pronto para hablar de su futuro en el fútbol, que va a depender de la recuperación y la propia voluntad del jugador.

"Dependerá de la medicación necesaria, de la evaluación que tendrá que ser hecha no solo en situaciones de reposo sino también de estrés como el ejercicio físico y también de la voluntad que tenga en continuar", dijo en declaraciones a Porto Canal, cadena propiedad del club.

Puga aseguró que tienen la certeza de que va a quedar "perfectamente recuperado", pero que solo después de tener en cuenta todos esos factores, "con mucha calma y mucho diálogo, se va a decidir si continúa y si quiere continuar".

Por su parte, Juan Antonio Corbalán, exjugador de baloncesto profesional y cardiólogo en la actualidad, considera que Iker Casillas no volverá a jugar al fútbol profesional. "No se puede jugar al fútbol con un stent coronario y mucho menos un portero ", indicó en TVE.

Sara Carbonero, esposa de Casillas, regresó ayer al hospital CUF de Oporto, donde está ingresado el deportista para acompañarle. "Afortunadamente todo ha quedado en un susto", fue el mensaje que lanzó en redes sociales, donde compartió una foto en la que se veía a ambos en el hospital y en la que agregó: "La vida tiene a veces esa extraña manera de recordarnos celebrar cada latido".