Con más de tres décadas de trayectoria es su primera exposición individual y, quizás por eso, el artista quiere mostrar sus orígenes como fotógrafo. En "Lo abstracto y lo concreto", Francisco Curra (Bueu, Pontevedra, 1964) presenta un proyecto de síntesis que se abrirá este viernes en la Fundación Laxeiro, donde estará instalada hasta junio.
Son treinta fotografías datadas entre 1988 y 2005 en las que Curra deja constancia de su talento para producir imágenes con una gran carga poética, a partir del entorno cotidiano. "Mi fotografía de objetos, bodegones... tiene algo de mí. Quizás en la forma de ver o en cierto trasfondo clásico, con mucha preocupación hacia el plano y el fuera de plano", reconoce a FARO el autor. "Trato de ser lo más sincero posible", confiesa el fotógrafo que huye de las artificiosidades. Sus fotos son naturalistas, en blanco y negro y con poca manipulación. "El blanco y negro es un mundo aparte, un universo muy especial que hoy suena a antiguo, pero que se sigue usando en medios y en publicidad. La gama de grises consigue transmitir algo que no logras con el color", explica.
Con un tono introspectivo, Francisco Curra nos va guiando por su intimidad, en un itinerario formado por interiores domésticos, retratos y paisajes que consigue atraparnos a través de un tratamiento formal impecable, en el que las sutiles gamas de grises y una composición precisa, nos introducen de lleno en los límites de lo visible.
El comisario de la muestra, Javier Pérez Buján, matiza que el autor bebió de clásicos como Alfred Stiglitz, Eugene Atget, Andre Kertesz o Laura Gilpin y autores posteriores, clásicos también, como Gabriele Basilico, Philip-Lorca Dicorcia, impregnado de esa atracción por el blanco y negro que a finales de los años setenta y en los años ochenta, practicaron autores como Francesca Woodman, Mapplethorpe, García Rodero o García-Álix
Curra, artista ajeno a los circuitos expositivos y editoriales del arte y la fotografía reconoce cierta necesidad interna de esta muestra: "Nunca había mostrado mi producción y me parecía importante que no quedasen en un cajón. Estaban positivadas y listas para exponer desde hace tiempo...", reconoce.
"Lo abstracto y lo concreto" nos invita a la ensoñación a partir del entorno cotidiano en un ejercicio de contemplación que trasciende las imágenes captadas para llevarnos al mundo interior del autor, en el que seguramente, hay algo también del nuestro.
La Fundación Laxeiro presenta la muestra de este artista atípico, con una trayectoria de más de treinta años pero que apenas ha mostrado su trabajo.
Por ello, tiene cierto carácter de primicia, de presentación de un autor que, pese a su experiencia, prácticamente se estrena en el ámbito expositivo.
"La forma es solo un medio de expresión, una herramienta para conseguir contar algo que, frecuentemente, está sólo dicho a medias. Por eso sus fotografías pueden parecer un mero ejercicio compositivo para convertirse, después de una observación más atenta, en una pregunta o un problema sin resolver, casi siempre planteado a partir de un proceso solitario de captación de las imágenes que potencia esa estética de la insinuación", resume el experto Pérez Buján.
Francisco Curra presenta este proyecto con una actitud de cierre de etapa, para después centrarse en futuros proyectos expositivos, compuestos de obra más reciente que abre otras vías de investigación. Él mismo avanza que ahí sí habrá color y collage y también, fotos realizadas con teléfono móvil.
