La gran cita estaba programada para las 20 horas, sin embargo, varios puntos de Galicia vivieron durante la jornada matutina manifestaciones a modo de previa. La de Vigo fue la más multitudinaria. Miles de personas se concentraron desde las 12 horas en el entorno del MARCO para conmemorar el Día Internacional de la Mujer y se movilizaron por las calles Príncipe y Urzáiz para apoyar la defensa de los derechos de la mujer con proclamas como "la raíz de nuestro mal es el sistema patriarcal", "mujeres somos, mujeres seremos, pero en casa no nos quedaremos", "no estamos solas, faltan las asesinadas", "igual trabajo, igual salario", "ni una menos", "mujeres unidas jamás serán vencidas" o "sin nosotras, el mundo no funciona" y han hecho un llamamiento a hacer una huelga de "24 horas" en el ámbito laboral, de consumo, de cuidados y estudiantil, entre otros.

Mucho camino por recorrer

Una vez en Porta do Sol, las participantes se mantuvieron durante cerca de una hora con pancartas en las que se podía leer "nos quitaron tanto que nos quitaron el miedo", "si nosotras paramos, la sociedad no avanza", "trataron de enterrarnos, pero no sabían que éramos semillas" o "sigo flipando por tener que hacer huelga para pedir igualdad".

Antía, de 15 años, fue una de las jóvenes que sujetaba la pancarta del sindicato de estudiantes. En declaraciones a FARO, la menor reconoció que acudía a la convocatoria de huelga porque cree "importante" la "defensa de los derechos y la igualdad entre todos". Aunque subrayó que en su hogar y en su entorno no se dan casos de machismo, sí destacó que hay episodios en el ámbito educativo: "El otro día, mi profesor hizo unos comentarios que no me parecieron muy normales, que las mujeres no podíamos enseñar los pechos, por ejemplo, en obras de arte; si los hombres pueden enseñar el torso, no entiendo por qué la mujer no puede solo porque tenga bulto". En este sentido, aseguró que este tipo de movilizaciones en el Día Internacional de la Mujer son necesarias para normalizar la situación y conseguir avances hacia la igualdad.

Otra de las manifestantes fue Sheyla, de 24 años, que se personó en la manifestación acompañada de Martín, un joven de 25 años. La primera destacó que su presencia en la concentración se debía a su voluntad de promover un cambio en la actualidad en la vida social de la mujer y en el papel que tiene en la sociedad. Así, apuntó que los actos promovidos por el movimiento feminista tienen sus frutos: "Tengo tíos y amigos que comienzan a cambiar la mentalidad y empiezan a asumir más tareas y echan una mano en casa". Por su parte, Martín añadió que "todos" somos parte importante a la hora de conseguir visibilizar más la situación para, "poco a poco", llegar al "objetivo real", que es "conseguir que haya igualdad total".

Por su parte, Gloria, de 52 años, dejó su puesto de trabajo en la oficina de empleo de Navia para hacer huelga y participar en la manifestación. Aseguró que el objetivo es hacer ver que el feminismo "no es lo que se piensa", sino una "lucha por los derechos y libertades de la mujer en todos los ámbitos". Asimismo, desveló su sorpresa por la cantidad de gente de menor edad que ha asistido: "Es importante incidir en los jóvenes; me ha sorprendido ver tanta gente joven, es algo muy positivo".