Cupido lanza flechas no solo al amor romántico, sino también a la sexualidad, ya que el día de San Valentín y el Día Europeo de la Salud Sexual ocupan la misma casilla en el calendario. La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la salud sexual como un estado de bienestar físico, mental y social en relación con la sexualidad, lo que requiere un enfoque positivo y respetuoso de la sexualidad y de las relaciones sexuales, así como la posibilidad de tener experiencias sexuales placenteras y seguras, libres de toda coacción, discriminación y violencia.
Los especialistas gallegos subrayan la importancia de disfrutar de una sexualidad plena como parte del bienestar personal, independientemente del sexo, condición o edad. A pesar de que reconocen que se ha avanzado en los últimos decenios, lo cierto es que el sexo, o al menos determinados aspectos, aún es un tema que sonroja en España. Muchos padres alertan a sus hijos de los riesgos del sexo sin protección, pero se detienen menos -o nada- a la hora de darles pautas para que tengan una experiencia sexual satisfactoria.
"La educación sexual tendría que estar enfocada no en la prevención de enfermedades o embarazos no deseados, porque de este modo quien cree que no corre riesgos no va a considerar que necesita aprender o mejorar nada. Debe enfocarse, igual que la definición de la OMS, como calidad de vida sexual que lleva a una calidad de vida personal", explica el sexólogo y psicólogo Emilio López Bastos, presidente de la Sociedad Galega de Sexología (SOGASEX) y vocal de la Federación Española de Sociedades de Sexología.
En general, a los españoles nos sigue costando acudir al especialista o al médico para consultar un problema de índole sexual, aunque cada vez menos. "Cada vez son más las mujeres que vienen a consulta porque tienen relaciones dolorosas o porque quieren tener relaciones satisfactorias y te lo dicen, algo que antes no pasaba", explica Elena Figueiredo, ginecóloga del Hospital Povisa de Vigo.
Las dos ginecólogas señalan que la salud sexual es tan importante a los 18 como a los 70 años y que hay que hablarlo con la pareja. "Una cosa que asumimos las mujeres es que no tenemos por qué obtener placer en todas las relaciones y lo que tenemos que entender es que somos diferentes, pero que también necesitamos pedir placer y obtenerlo. Hay muchas pacientes que dicen que no han tenido un orgasmo en su vida", añade su colega, la doctora Villamarín.
La otra cara de la moneda es el aumento de consultas por enfermedades venéreas en personas de más edad: "Hay que tener sentido común. Estamos encontrando muchísimos condilomas anales, algo que hace diez años prácticamente no se veían, e incluso hemos tenido algún caso de papiloma en mujeres de 60 años", añade la doctora Villamarín.
En cuanto a los adolescentes, estos continúan introduciéndose en el mundo de la sexualidad a través de la experiencia de los amigos y, desde la irrupción del mundo digital, internet, un canal que al presidente de la Sogasex le parece no solo erróneo, sino peligroso. Aunque los adultos tampoco escapan a la tentación de consultar sus dudas a golpe de clic.
"Uno de los principales canales por el que los chavales se inician en la sexualidad es el porno online, lo que es preocupantes porque la pornografía da una imagen falsa de la sexualidad tradicional no deja de ser una forma de educación que transmite modelos de la sexualidad que son negativos y que perpetúan mitos muy venenosos, como la importancia del tamaño del pene o que si la eyaculación se produce de pie no se produce el embarazo. Y los adultos también tiran de Google para consultar dudas o buscar solución a un problema", manifiesta el especialista, quien recomienda adquirir un libro científico, contrastado, antes de adentrarse en la maraña de la red. "El problema de internet es que hay opiniones de todo tipo, sin contrastar y sin aval científico, y además, lo normal es que te quedes con las negativas antes que con las positivas aunque sean menos", añade.
Por su parte, las dos ginecólogas de Povisa recomiendan consultar con el médico de cabecera o el especialista cualquier problema sexual. "No hay por qué callarlo, sino tomarlo como algo normal y consultarlo como haría con cualquier otro problema de salud", aconseja la doctora Figueiredo.
EMILIO LÓPEZ BASTOS - SOCIEDAD GALEGA DE SEXOLOGÍA
"Si tiene dudas sobre sexo, mejor un libro contrastado que buscar por internet"
