La primera muerte por atropello de un patinete eléctrico ha abierto el debate sobre si sus usuarios deberían estar obligados a tener un seguro. "La póliza de responsabilidad civil o la del seguro del hogar que incluya estos artefactos cubre esos accidentes pero es una responsabilidad subjetiva, es decir, la víctima está obligada a demostrar que el patinete fue el causante y no hay un baremo objetivo como en tráfico", explica el director de la Fundación Inade, Adolfo Campos. Para que exista una "responsabilidad objetiva", añade, es preciso que los patinetes se clasifiquen como vehículos a motor dentro de una reforma de la legislación del seguro del automóvil. "Tendrían que tener una placa, pasar revisiones, tal vez un carné, regular las pruebas... no es tan sencillo. Llevamos años esperando a que se haga algo con las bicicletas, en especial las eléctricas y seguimos esperando porque se habla mucho pero no se toman las decisiones", recuerda.

La regulación de los nuevos vehículos urbanos es una de las reivindicaciones del Comité de Entidades Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi), que incide en la inseguridad y la falta de accesibilidad que generan. El presidente de Cermi Galicia, Iker Sertucha, recordó ayer que desde hace tiempo reclaman a las instituciones medidas ante los patinetes eléctricos, que tienen "un riesgo potencial" para las personas con discapacidad. Su demanda, que "por ahora no ha recibido respuesta de la Xunta ni del Gobierno", reclama un control de velocidad y que se determine si pueden circular o no por las aceras "generalmente demasiado estrechas" pero también incide en la importancia de que se estacionen correctamente.

"Ocurre lo mismo con las bicicletas o las motos, cualquier vehículo estacionado en la acera es un problema porque reducen el espacio para las sillas de ruedas y suponen obstáculos imprevisibles para las personas que no ven y un peligro para las que no los escuchan llegar", remarca Sertucha, que insta al "uso responsable" de éstos por parte de la ciudadanía.