Los artefactos flotantes más hilarantes y coloristas protagonizaron ayer la travesía más divertida del Miñor, la llamada "Flota como puedas", un evento que cada verano congrega a un mayor número de público en A Ramallosa, y es que ver navegar a estas embarcaciones es toda una experiencia. Cerca de cien valientes participantes, a bordo de quince embarcaciones sin motor, cada cual más alocada, se atrevieron a bajar el río Miñor desde el puente da Ramallosa en un recorrido circular que tuvo como metal final el mismo punto. Esta concentración de artefactos flotantes tiene como aliciente los premios que otorga el Concello a la embarcación más cutre y a la más currada; a la tripulación más simpática; a la familia más intrépida y participativa; al tripulante de mayor edad y al más joven; y al "Titanic" de la edición, es decir, a la que acabó naufragando.