Comenzó su carrera en FARO, donde aprendió, afirma, el oficio, para pasar después a la TVG, donde fue guionista, realizador y director, y que dirigió durante el gobierno bipartito. Tras su paso por Telecinco, donde fue director de estrategias de contenidos, Suso Iglesias regresó a Galicia. Ahora vive entre Vigo y Barcia de Mera (Mondariz) y, aunque acaba de jubilarse, se mantiene en activo. Entre otros, prepara varios proyectos con motivo del 25 aniversario del "Xabarín Club", del que es uno de sus creadores.

-¿Qué hace ahora Suso Iglesias?

-Acabo de jubilarme, aunque sigo muy activo. En esta profesión, no desconectas nunca. Ahora estoy implicado en un proyecto muy bonito, "Luzes", una revista que dirigen Manuel Rivas y José Manuel Pereiro donde hay diversas generaciones, desde gente jubilada a gente muy joven, y tiene el mérito de resistir. Llevamos ya cinco años con una revista mensual en papel, lo cual es difícil de explicar en estos momentos, y hace unos meses creamos un espacio virtual, Luzes.gal.

- Internet ha supuesto un cambio radical, ¿cómo lo vive usted?

-A veces es un poco complicado ubicarse porque la información es casi al momento. Ya no vas al quiosco a comprar el periódico, y ahora hablo como lector, ni te sientas a leerlo tranquilamente. Ahora estás al mismo tiempo con Facebook y Twitter, y a veces da la impresión de que la preferencia de las noticias te las da un montón de gente que no conoces. Se pierde la perspectiva del periodista como prescriptor. Ahora cualquiera te escribe una noticia.

- ¿Cuándo descubre su vocación?

-Lo del periodismo fue un poco al azar. Comencé a estudiar Económicas en Santiago, pero no me encontraba cómodo y además quería irme fuera, y la opción era cambiar de carrera, así que me fui a Madrid a estudiar Periodismo. Me gustaba más el cine, pero me parecía que iba a ser muy difícil trabajar en ello.

- ¿Qué recuerda de sus inicios?

-Recuerdo el FARO porque allí empecé y allí aprendí el oficio. Estuve diez años, en una época en la que convivíamos distintas generaciones, el acceso a la profesión era distinta y había un ambiente un tanto canalla y de mucho colegueo. No existía la Wikipedia, pero había gente sabia. Se valoraba al periodista que, por edad, sabía lo que era importante.

- Dirigir una cadena autonómica es otra cosa, ¿no?

-Estaba bastante curtido porque llevaba 20 años como currito, pero sí, fueron cuatro años en los que estuve totalmente ocupado. El sufrimiento es permanente. Te pasas la vida opinando, por lo que si te ofrecen la oportunidad de cambiar algo no te puedes echar atrás porque si no te sitúas en la situación de bocazas que solo habla, pero que a la hora de hacer algo te da miedo.

- Es uno de los creadores de "Xabarín Club", todo un referente.

-Con el paso de tiempo, "Xabarín Club" se queda como uno de esos momentos importantes en tu carrera, aunque no lo veas en el momento. Hoy hay una generación de gallegos y gallegas, de entre 25 y 40 años, la "Xeración Xabarín", que tiene esa referencia iconográfica que les da ese sentimiento de tribu.

- ¿Algún programa de los de ahora dejará esa huella?

-Eso es irrepetible. Tiene que ver también con un momento. Eran los años 90, las televisiones autonómicas tenían más fuerza y se daba más importancia a la producción propia porque "Xabarín" solo se puede entender en un contexto de producción propia de una televisión pública. Teníamos un gran apoyo, una política de promoción del gallego más favorable, más recursos... El escenario televisivo también era distinto, no había canales temáticos, y luego coincidió un factor social importante: una generación de padres, criados en la democracia, que buscaban una relación con los hijos diferente. Y nosotros éramos un equipo muy motivado y que supo aprovechar todo esto.

- Su última parada fue Telecinco. ¿Cómo fue la experiencia?

-Allí fui director de estrategias de contenidos, algo así como el adjunto al director de programas, Manuel Villanueva, gallego también y a quien conocí cuando comencé en TVG. Fue una experiencia más y la vida es sumar experiencias.

- Se jubila pero no se retira.

-No. En la Productora Faro produje una serie documental, "Naqueles tempos", una cosa muy personal, una visión de la sociedad gallega de los años 50, 60 y 70 utilizando la música como vehículo conductor, de la que pretendo hacer más capítulos en la medida que me lo permitan los condicionantes laborales.

- ¿Le gusta la música?

-En Galicia no es muy original que te guste la música, porque somos un país muy musical. Galicia y Andalucía son las dos zonas de España con una música más rica, más de raíz y esto se nota. A la gente le gusta cantar, hay música de todo tipo y luego estuvo la movida...

- ¿Qué opina de la ficción que se hace en estos momentos?

-Hay una creatividad y un talento enormes, y la TVG produjo grandísimas series y fue una importante cantera. Cuando estuve en Madrid, descubrí que hablar de Galicia en el audiovisual era algo de prestigio, lo que es difícil cuando vienes de la periferia en una industria tan centralizada como esta. Sin embargo, en los últimos años se ha perdido mucho y no creo que solo sea por la crisis. Creo que no ha habido una política de prescribir bien los proyectos.