Puede decirse que vuelve a sus orígenes, al barrio que vio nacer su pasión por el cine, a casa. El director vigués Pedro Sancho rueda, desde hoy y hasta el domingo en Coia, su sexto cortometraje, "Marusía", protagonizado por Antonio Durán "Morris" y Fran Paredes, a quien ya dirigió en la obra de teatro "Lavar, marcar y enterrar". La historia se desarrolla en una noche y tiene como protagonistas a dos amigos, Pedro y Juan, quienes, ante la desesperación de una vida (casi) rota, deciden huir hacia adelante con una acción que no tendrá vuelta atrás: la voladura del barco de Alfageme. Dos mujeres están a frente de la producción de este corto: Henar Sancho (productora ejecutiva) y Raquel Figueiredo (directora de producción).
-¿Por qué el barco de Alfageme para contar esta historia?
-Porque Coia es donde nací, aunque ahora viva en Madrid. Conocía la historia del barco y toda la polémica que hubo con su traslado. Inspirándome en este contexto me vino a la mente la imagen de esos dos perdedores, Juan y Pedro, que están sin trabajo y deciden huir hacia adelante en una huida sin mucho sentido, vengándose de todo y de todos volando el barco. Podría ser el barco como podría ser otra cosa. Pero este contexto me parecía muy interesante para contar como a veces, las personas toma decisiones absurdas porque volar el barco tampoco le va a cambiar la vida. Es como un juego de niños, porque además tampoco quieren volarlo todo; solo un trocito...
-¿Cómo son Juan y Pedro?
-Juan (Paredes) es un hombre de unos cuarenta y largos años y Pedro (Morris) de unos cincuenta y largos, probablemente sin trabajo o a punto de quedarse sin trabajo, probablemente sin familia o a punto de quedarse sin sus mujeres. Son dos tipos que pasan las tardes jugando a las cartas en el bar del barrio de toda la vida, sin expectativas y con ese rencor a la vida de por qué no soy lo que quise ser. Son dos personajes que cree pensando en Morris y en Paredes, por lo que estoy encantado de poder contar con ellos. Es un lujazo poder trabajar con dos actorazos como ellos.
-Una huida hacia adelante que no pinta nada bien para estos dos amigos...
-No porque además no son, para nada, unos terroristas. Ni siquiera son activistas. De hecho, no van a manifestaciones ni forman parte de nada, pero deciden poner esa bomba, sin ningún plan y sin saber muy bien qué están haciendo.
-Hay mucha gente como ellos, que no forman parte de nada...
-Todos somos un poco así. Nos quejamos de muchas cosas, pero luego queda todo en agua de borraja. Y el barco es una muestra de ello: con todo el revuelo que hubo este fue la portada de las fiestas de Coia. Después de tanto lío, parece que a los vecinos ya no les molesta tanto. El ser humano es contradicción pura, y a mí me gusta mucho manejar el drama desde la comedia porque esta es en realidad una historia muy seria que tiene más trayectoria que el corto y que espero poder hacerla en largo formato.
-HBO adquirió su último corto, "La madrina". ¿Es una buena tarjeta de presentación?
-Sin duda. Como los premios, te sirve para que te tomen en serio cuando llamas a una puerta para presentar tu trabajo.
