El escritor y poeta Luis García Montero, que será el nuevo director del Instituto Cervantes tras su nombramiento hoy en Consejo de Ministros, admitió ayer en una entrevista con Europa Press que la financiación será uno de los puntos clave de su gestión, porque "para hacer cosas siempre hace falta dinero". "Esa es la realidad: tras muchos años en la universidad, uno se da cuenta de que lo más poético que hay son los números y las cuentas. Para hacer cosas hace falta dinero y la inversión en cultura es uno de los grandes retos", dijo.

García Montero explicó que recibió la llamada del Gobierno hace "unos días" y pidió tiempo para consultarlo con su familia. Tras dar el sí y "aceptar con gusto" este cargo, finalmente se ha hecho oficial este jueves. "Es un cargo que acepto con mucha responsabilidad y soy consciente de la exigencia del puesto", dijo.

García Montero tuvo palabras de elogio para su antecesor, Juan Manuel Bonet, del que reconoce ser "amigo de la literatura" y añadió que espera "aprender mucho de la gestión" de esta última etapa. Asimismo, insistió en mantener la "despolitización" del Cervantes.

Añadió que, por el momento, su prioridad es la de "hablar" tanto con el personal de la institución como con los distintos ministerios responsables del Instituto para "conocer las virtudes y defectos que se pueden subsanar", además de "sentarse a pensar que se puede aportar". Preguntado sobre una política de expansión de centros, reconoció que una de sus obligaciones es la de "trabajar por el español y su imagen en el mundo".