Dando por hecho que el cambio climático es una realidad incuestionable, el sector vitivinícola afronta un futuro lleno de incertidumbres. El catedrático de Viticultura de la Universidad Politécnica de Madrid y vicepresidente de la Organización Internacional de la Viña y el Vino, Vicente Sotes Ruiz, participó ayer en Ourense en la jornada técnica sobre los retos de la viticultura ante el cambio climático. "El impacto existe y está produciendo alteraciones en las condiciones del cultivo", advierte.

Modificar las técnicas y herramientas empleadas hasta ahora, adelantar la vendimia o introducir nuevas variedades de uva son decisiones que el viticultor deberá analizar en el corto plazo, indicaron los expertos participantes. O lo que es lo mismo, "tomarse muy en serio el cambio climático y tirar para adelante", en palabras de Sotes.

Este nuevo escenario al que se enfrenta el sector vitivinícola protagonizó la primera sesión técnica de la II Semana de la Viticultura de Galicia que organizan la Estación de Viticultura e Enoloxía de Galicia, EVEGA, y la Diputación. El foro se inauguró el lunes y se desarrollará hasta mañana combinando jornadas técnicas, talleres prácticos, tertulias y catas comentadas.

Cómo está afectando el cambio climático a la vid y las medidas de adaptación a esta nueva realidad centraron ayer la sesión de mañana, con ponencias y debates desde las 9.00 a las 14.00 horas en el Centro Cultural Marcos Valcárcel.

Temperaturas más altas

Sotes Ruiz señaló que el cultivo del viñedo es muy antiguo pero que nunca antes el viticultor se había enfrentado a alteraciones como las que ahora se producen a consecuencia de este fenómeno climático. "Las temperaturas son más altas y el ciclo más corto; la uva no madura igual", explica.

La temperatura y la disponibilidad de agua son dos factores determinantes en este nuevo contexto de variabilidad que afectan a la maduración de la uva. El problema, señala Vicente Sotes, "es que existen incertidumbres sobre lo que va a pasar, porque no se sabe cómo se comportarán las variedades ante un cambio tan rápido como el que se está dando ahora". El catedrático de Viticultura en la Politécnica de Madrid señala que el cambio climático también hace que se multipliquen las plagas que afectan al cultivo y que aparezcan otras nuevas.