Los españoles son, después de los portugueses, los que más entradas han comprado para la próxima edición de Eurovisión, cuya final se celebrará el 12 de mayo en Lisboa, avanzaron ayer los organizadores del concurso. "Después del mercado portugués, que constituye un universo de 27 % hasta el momento España es el segundo país con mayor numero de compradores", dijo João Nuno Nogueira, productor ejecutivo del certamen. Los eurofans españoles se han hecho ya con el 15,9 % de los asientos puestos a la venta, seguidos muy de cerca por compradores del Reino Unido, que ya tienen el 14,1 %, y, bastante más lejos, por los alemanes, que han asegurado el 7,9 % de asientos. Prueba de ello, dijo, ha sido el veloz proceso de venta de entradas para las semifinales, que tendrán lugar los días 8 y 10 de mayo, y la final, que se ha realizado de forma escalonada desde el pasado noviembre con idéntico resultado: agotadas en apenas horas.

Precisamente ayer se puso a la venta una nueva tanda de entradas, que incluye últimos lugares para la gala final, con precios de hasta 299 euros y que, en su versión más cara, incluye conocer el "backstage".