La de docente es una profesión, sin duda, vocacional: no es fácil lidiar a diario con decenas de niños y adolescentes a los que, en su mayoría, lo último que quieren es estar encerrados entre cuatro paredes atendiendo a lecciones que no le interesan demasiado.
Para dar salida a esas dificultades asociadas al trabajo de enseñar, decenas de profesores han echado mano de obras de arte famosas y de grandes dosis de humor. Unidos por el 'hashtag' #CuadrosDocentes, en las últimas horas decenas de ellos han ido añadiendo sus particulares interpretaciones de estos cuadros. El resultado no puede ser más ilustrativo sobre su día a día, al tiempo que arranca una sonrisa. Aquí una muestra:
