Más de 7.800 gallegos tienen obesidad mórbida, un problema que va más allá del aspecto físico, ya que está asociado a graves enfermedades y reduce dramáticamente la expectativa de vida de quien la padece. Según la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO), entre un 1 y un 2% de españoles tienen obesidad grave, y Galicia se encuentra entre las comunidades con un mayor porcentaje, junto con Extremadura, Andalucía, Murcia y Canarias. Para los especialistas, se trata de un problema de salud pública de primer nivel que aumenta cada año. Se considera que una persona tiene obesidad mórbida cuando su índice de masa corporal (IMC) es igual o superior a 40.

El Grupo Gallego de Tratamiento de la Obesidad Grave (CGTOG), formado por endocrinos y cirujanos, centra su segundo simposio, que celebra hoy en Santiago, en la cirugía bariátrica y en la importancia de los profesionales de atención primaria en el seguimiento postoperatorio del paciente. "Esta cirugía es, hoy por hoy, la única solución eficaz para la obesidad mórbida", asegura Isabel Otero, cirujana de la Unidad de Cirugía Esófago-Gástrica y Bariátrica del Hospital Universitario Hospitalario de Vigo (Chuvi), el primer centro que realizó, en 1996, una reducción de estómago en Galicia.

La Unidad de Cirugía Esófago-Gástrica y Bariátrica del Chuvi realizó el pasado año unas 70 intervenciones. Según la doctora Otero, que moderará una de las sesiones del simposio, ocho de cada diez pacientes que se someten a esta cirugía son mujeres. La mayoría tiene entre 30 y 50 años. El paciente más joven que ha pasado por esta unidad del Chuvi tenía 18 años y el mayor, 73.

Lo que se logra con esta técnica es reducir la capacidad de ingesta del paciente para que así pierda peso. El mayor peso perdido tras esta intervención ha sido de 100 kilos.

Según la especialista viguesa, la demanda para someterse a esta operación es cada vez mayor. Tanto es así que los pacientes que están interviniendo ahora pasaron los estudios fisiológicos y psicológicos en 2013. "Esto constata que la cirugía funciona no solo para la pérdida de peso, sino también para muchas de las enfermedades asociadas a estos pacientes, como la hipertensión, el colesterol alto, la diabetes, problemas de articulaciones, apnea del sueño, infertilidad en el caso de las mujeres y varios tipos de cánceres. La obesidad mórbida reduce además la expectativa de vida de una forma tremenda", comenta.

Tras la intervención, los pacientes suelen perder entre siete y diez kilos al mes, y después entre cuatro y cinco. El peso suele estancarse a los dos años, aunque para que esto ocurra, es necesaria la colaboración del paciente. "El paciente no puede hacer trampas. El procedimiento restrictivo va a hacer que el paciente no pueda comer un plato enorme, pero sí podrá comer a todas horas dulces, por lo que los resultados de la cirugía no serán buenos", advierte.

La doctora Otero añade que la cirugía bariátrica compleja requiere de una serie de medios de los que no disponen todos los hospitales gallegos, así como un equipo de cirujanos especialistas en este tipo de intervención y el Chuvi lleva años formando a cirujanos en esta cirugía. Los próximos lunes y martes, celebrará en el Álvaro Cunqueiro un nuevo curso, donde diez cirujanos procedentes de distintas partes de España aprenderán esta técnica participando en ocho operaciones de obesidad mórbida.

"Se está investigando mucho en el campo de la obesidad y posiblemente en unos años se descubra por qué unos pacientes tienden a engordar y otros no, pero por el momento, la solución más acertada es esta", insiste la cirujana del Chuvi.

Aunque detrás de la obesidad hay un factor genético, en el 60% de los casos la principal causa son los factores ambientales, lo que los especialistas llaman "el ambiente obesogénico". "El gran reto ahora es descubrir cuáles son los mecanismos que llevan a que un individuo desarrolle obesidad y otro no dentro del mismo ambiente obesogénico, y por qué uno desarrolla comorbilidades y otros no", explica la bióloga Ana Belén Crujeiras, investigadora del Centro de Investigación Biomédica en Red-Fisiopatología de la Obesidad y la Nutrición (Ciberobn), que moderará otra de las mesas de este simposio, auspiciado por la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO) y la Sociedad Española de Cirugía de la Obesidad (SECO).

El grupo al que pertenece Crujeiras busca los mecanismos moleculares implicados en el desarrollo de la obesidad. "Sabiendo cuáles son estos mecanismos podremos identificar nuevas dianas terapéuticas para diseñar algún fármaco eficaz contra la obesidad y también para poder tratar a cada paciente de forma personalizada", explica.

La científica añade, sin embargo, que aún queda mucho para controlar esta epidemia. "Se ha avanzado bastante en su conocimiento, pero su prevalencia está creciendo muchísimo. El trabajo de los médicos ya no parece ser suficiente para controlarla. Deberíamos trabajar todos en conjunto y fomentar las campañas de prevención", apunta.

Isabel Otero - CIRUJANA DEL CHUVI

"En estos momentos, la cirugía bariátrica es la única solución eficaz para la obesidad mórbida"

ANA BELÉN CRUJEIRAS - Científica

"El reto es saber cuáles son los mecanismos que hacen que una persona gane peso y otra no"