La aventura de leer un libro bien sea en papel o en soporte digital sigue causando alergia o suponiendo una misión imposible para un gran porcentaje de gallegos. El Barómetro de Hábitos de Lectura y Compra de Libros 2017 -encargado por la Federación de Gremios de Editores de España- lo ha certificado con unos datos que pesan, y mucho, sobre una sociedad que presenta sombras y luces en su relación con la lectura. Por un lado, el índice de lectura en Galicia ha crecido un 7% en los últimos seis años -entre 2011 y 2017- al pasar del 54,7% al 58,6%. Es decir, casi 59 de cada cien gallegos mayores de 14 años de edad lee libros. A pesar de este aumento, la autonomía está por debajo de la media española. Como apunte positivo, los lectores gallegos son los cuartos de España que más libros compran al año de media.

En concreto, adquieren un promedio de 9,8 obras que no son libros de texto, los utilizados en colegios, institutos o como lecturas obligadas en la universidad.Por delante de Galicia en este punto, se encuentran Navarra con casi 13 libros al año; seguida de Madrid, con 11; y Asturias con 10.

Sin embargo, las autonomías con mayor porcentaje de compradores durante el pasado año fueron País Vasco y La Rioja, sobrepasando el 57% de la población; frente al 47,5% de Galicia.

En el Barómetro de los editores españoles, también hay un apartado para el análisis del índice lector, que se refiere al porcentaje de gente que lee cualquier clase de libro -incluidos los manuales y libros de texto- y que ha crecido en todas las comunidades desde el año 2011 a excepción de Extremadura.

Madrid es la comunidad con mayor porcentaje de lectores en su tiempo libre (71%); seguida de Navarra (65%) y País Vasco, La Rioja y Cantabria por encima del 63%, bastantes puntos alejadas de Galicia y su 58,6%. Este índice gallego se encuentra por debajo del promedio español (65,8%) y a años luz de la media europa del 70 por ciento. El Barómetro no solo se ha fijado en las cifras sino también en lo que hay detrás de ellas.

Las razones para no leer

Por ejemplo, indaga en las razones con las que los desertores de la lectura justifican su rechazo a la misma. "La falta de tiempo -señala el informe- sigue siendo el principal argumento de los no lectores para explicar su falta de hábito". La segunda explicación señala que no leen porque o no les gusta o no les interesa prefiriendo ocupar su tiempo de ocio a otras cuestiones.

Por otra parte, desde el año 2012, el soporte digital ha ido ganando adeptos. El 20% de la población ya lee libros en dicho formato en su tiempo de ocio mientras que el 40% se reserva solo para el papel. Un dato importante es que un elevadísimo porcentaje de los participantes en el Barómetro de los editores y que reconocieron la lectura digital apuntaron que obtuvieron el 80% de los libros de forma gratuita.