"¿Dónde está la contaminación? A ver, que yo la vea", terciaba a la periodista un hombre mientras gesticulaba abruptamente. Sus declaraciones, en medio de una de las alertas por aire contaminado más duraderas en la historia reciente de Madrid, se convirtieron en un fenómeno viral en las redes sociales. Las partículas de dióxido de nitrógeno, PM2.5 u ozono en el aire no son perceptibles al ojo humano, pero un mapa creado por la Agencia Europea de Medioambiente permite ahora conocer en directo el nivel de polución en el aire que respiramos.

El 'European Air Quality Index' ('índice europeo de calidad del aire', en español), muestra en tiempo real y hasta las últimas 48 horas los niveles recogidos por más de 2.000 estaciones en todo el continente. El informe del organismo comunitario señala que los peores niveles se encuentran en el Este, mientras que Alemania goza de una "excelente calidad".

Los puntos en los que se sitúan las estaciones ofrecen una escala de colores del verde claro al rojo oscuro, indicando así si el aire es "bueno" o "muy pobre". En el mapa también figuran puntos en gris, principalmente en Italia, Grecia, Islandia y Turquía, que representan medidores que no ofrecen sus datos en tiempo real.

Los contaminantes analizados son ozono, dióxido de nitrógeno, dióxido de azufre y partículas PM10 y PM2.5. Estas últimas, con un tamaño decenas de veces inferior al diámetro de un cabello, logran adentrarse con facilidad en los pulmones y en el torrente sanguíneo.

Los cinco gases están relacionados con el cáncer de pulmón, la diabetes de tipo dos y problemas de corazón. "La polución en el aire es un asesino invisible, por lo que este índice es necesario para informar a los ciudadanos europeos sobre el aire que respiran", indica Karmenu Vela, comisario europeo de Medioambiente.

El informe de la Agencia Europea de Medioambiente indica que las muertes prematuras en suelo urbano relacionadas con las partículas PM2.5 están relacionadas con la contaminación ambiental. Se estima que 420.000 ciudadanos europeos murieron en 2014 por complicaciones vinculadas a la calidad del aire. Las principales fuentes emisoras son el transporte urbano, la agricultura, la industria, los hogares y las plantas de energía.

Los peores niveles recogidos en Galicia durante las últimas doce horas se han dado en Santiago de Compostela, donde la calidad del aire era pobre debido a la alta presencia de partículas PM2.5 en el aire.