El "aeropuerto más inútil del mundo", según lo ha calificado la prensa británica tras un coste de 320 millones de euros recibirá su primer vuelo comercial por fin. Se estrenará realmente después de una prolongada inactividad de más de un año desde que fue inaugurado oficialmente.

El aeropuerto se sitúa en Santa Helena, una de las islas más inaccesibles y aisladas del planeta, ubicada en el Atlántico Sur, territorio de ultramar del Reino Unido, y que muchos conocen por haber sido el lugar en el que Napoleón Bonaparte fue desterrado y murió. A este destino llegará un vuelo semanal desde Johannesburgo y Ciudad del Cabo, con escala en Windhoek (Namibia), con precios que oscilarán entre los 904 y los 1.783 euros. Cada vuelo podrá acoger hasta 68 pasajeros.

En su página web, Airlink asegura que Santa Elena es un destino ideal por su "abundancia de flora y fauna", y destaca la "oportunidad de nadar con tiburones ballena". También la posibilidad de inmersión "en el capítulo final de Napoleón que ofrece este paraíso subtropical". La compañía promociona la isla como "uno de los lugares más extraordinarios del mundo".

La historia de este raro aeropuerto se remonta a 2005, cuando el gobierno británico anunció por primera vez sus planes para construirlo. Sin embargo, los problemas en encontrar una financiación y las dificultades técnicas que significaba su construcción retrasaron el inicio de las obras hasta 2011.