El veranillo de San Miguel se dejó sentir ayer con fuerza en el sur de la comunidad, donde se alcanzaron temperaturas máximas superiores a los 37 grados en la provincia de Ourense y que hizo que los termómetros de muchas zonas de las Rías Baixas superara la barrera de los 30º. Arnoia fue el municipio que alcanzó la temperatura máxima mayor: 37,5º, seguida por Leiro, que se quedó a dos décimas (37,2º). En Ourense capital, los termómetros alcanzaron los 34,2º, mientras que la localidad pontevedresa de Arbo llegó a los 35,1º Tui los 34,3º y Vigo los 28º, temperaturas todas estas muy inusuales para el arranque del otoño.
Las temperaturas veraniegas también marcaron el inicio de la semana en la mitad norte de la comunidad, aunque mucho más bajas y es que el veranillo de San Miguel dejó una brecha térmica de hasta 17 grados entre el norte y el sur de la comunidad.
La influencia anticiclónica continuará sobre la comunidad, con un frente muy deshecho rozando el sector norte, donde no se descarta alguna lluvia débil y ocasional. Meteogalicia prevé cielos de nuevo despejados, aunque con un descenso de las máximas, que, sin embargo, continuarán siendo veraniegas. Así, se prevé que Ourense supere la barrera de los 32º, mientras que en Pontevedra se rozarán los 27º y en Vigo, los 23º. Asimismo, se prevé que los termómetros alcancen los 23º en Ferrol y los 21º en A Coruña.
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Para mañana, miércoles, se aguarda un nuevo ascenso de las temperaturas en toda la comunidad, con temperaturas cercanas a los 27º en Pontevedra y los 25º en Vigo y Santiago, mientras que se esperan máximas cercanas a los 27º en Lugo, los 25º en Ferrol y 23º en A Coruña.
Las altas presiones continuarán el jueves, por lo que se espera otra jornada de cielos pocos nublados o despejados, con algunas nubes bajas y nieblas en la mitad norte al principio y al final del día. Las temperaturas no experimentarán cambios significativos, con máximas de 29º en Ourense, 26º en Pontevedra, 25º en Vigo, Santiago y Lugo, y 22º en A Coruña.
