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Llanto en la sala oscura

Llanto en la sala oscura

Quién nos iba a decir que la primera realizadora de aquel trilero movimiento llamado Dogma, responsable de dos joyas como Wilbur se quiere suicidar e Italiano para principiantes, terminaría instalada en la zona de confort británica con títulos menos rompedores aunque tan estimables como An education o esta Su mejor historia. Todas ellas tienen algo en común:_la habilidad y sensibilidad con la que la cineasta funde drama y comedia sin que se rompan nunca las costuras. Y a eso ayuda, cómo no, lo bien dirigido que está el reparto. Que Bill Nighy se adueñe de cada plano es inevitable porque es un actor portentoso, de esos a los que solo hay que decirles corten y acción, pero Gemma Arterton nunca estuvo tan bien, aportando a su personaje todos los matices que exige en un desarrollo cambiante que la hace pasar por distintas etapas emocionales. Sus escenas con Sam Claflin desprenden autenticidad y cuando comparte minutos con Nighy surgen momentos tan extraordinarios como el que muestra su desahogo incontenible que rompe la mordaz flema de su interlocutor.

Lone Scherfig saca el mayor partido posible a sus actores y los hace creíbles:_una naturalidad que aleja la película del abismo de lo convencional o de la recreación rancia de un momento histórico. Sin cargar nunca las tintas en los efectos de los bombardeos nazis y modulando con tino tanto la parte de humor (los caóticos rodajes) como las tramas de amor, Su mejor historia ofrece, además, oportunas reflexiones sobre el sustrato embaucador/manipulador/ilusionador del cine (en este caso, pura propaganda en tiempos de guerra, pero incluso la propaganda debe estar hecha con talento o no surtirá efecto alguno) y, algo muy de moda, sobre la adulteración de la verdad para engañar al espectador, en este caso usando la retirada de Dunkerke y las historias de heroísmo que interesa mostrar a la ciudadanía para animarla, falseándolas si es necesario para lograr lo que se pretende. Un anticipo ideal para recibir la próxima semana la epopeya ultrarrealista de Christopher Nolan.

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