Cuatro de cada cinco menores muertos por ahogamiento no estaban vigilados y el perfil de los fallecidos es el de un niño varón, de entre 2 y 4 años y en un entorno no vigilado, principalmente piscinas particulares.

Estos datos se corresponden con los últimos cinco años, de 2013 a 2017, un periodo en el que el número de niños ahogados asciende a 117.

Los meses con mayor índice de decesos corresponden con el período estival y son las horas centrales del día -entre las 13.00 y las 19.00- cuando más menores mueren ahogados.

Informe Nacional de Ahogamiento de Menores

Así lo recoge el Primer Informe Nacional de Ahogamientos de Menores, elaborado por la Escuela Segoviana de Socorrismo, que incluye datos obtenidos entre el 1 de enero de 2013 y el 14 de junio de 2017.

De los 117 menores fallecidos por ahogamiento en el último lustro, 85 eran chicos y 32 chicas, y cuatro de cada cinco no estaban vigilados.

Según el tipo de instalación, el 58 % de los ahogamientos infantiles ocurren en piscinas, seguido por embalses o ríos (31 %) y playas (9 %).

Por edades, la franja de entre 2 y 4 años es la peor parada, con 54 muertes por ahogamiento, seguida por los adolescentes de entre 15 y 17 años (21 fallecidos) y los niños de 6 a 8 años (20).

Por el contrario, apenas se producen muertes entre los recién nacidos (3 fallecidos menores de 2 años) y en la franja de 9 a 11 años (4 muertes).

En 2015, 33 niños murieron ahogados en España

De los últimos cinco años, 2015 y 2013 fueron los "más negros", con 33 y 29 decesos de menores respectivamente, mientras que en 2014 perecieron 22 y en 2016 veinte.

En lo que va de año, el número de ahogamientos mortales de menores asciende a 13, lo que supone un incremento del 62 % respecto a las cifras registradas el año anterior por estas mismas fechas.

En cuanto a la nacionalidad de los menores fallecidos, la gran mayoría (67) eran españoles; 12 marroquíes; 8 franceses y 7 eran británicos.

Andalucía (27 fallecidos), Cataluña (19) y la Comunidad Valenciana (18) son las autonomías más afectadas; mientras que Asturias y La Rioja (uno cada una), y Extremadura y País Vasco (2) además de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, donde no ha fallecido ningún menor ahogado en los últimos cinco años, son los lugares donde menos decesos de este tipo se producen.