Rayden es el pseudónimo de David Martínez Álvarez (Madrid, 1985), poeta y cantante de rap, un artista polifacético y rebelde que disfruta rimando palabras y a quien le gustaría vivir, confiesa, en un concierto eterno. Mañana, estará en Vigo con su nuevo trabajo, "Antónimo", en el Island Club (21.00 horas), dentro de los "Escenarios de Mahou", con un formato en el que a los elementos propios de un concierto de rap, suma una banda. Y es que a Rayden le gusta "desdoblar los términos" para darles su propio significado.

- ¿Cómo definiría "Antónimo"?

-Es el primer disco de una trilogía que gira en torno a la palabra y su leitmotiv se basa en esa lucha de contrarios buscando su punto medio, que somos cada ser humano. Supongo que algo que tenemos cada ser humano es que siempre nos debatimos en dos visiones totalmente diferentes.

- Y en este contexto, ¿qué papel juega la música?

-A lo mejor de válvula de escape o de espejo donde mirarse, o de vertedero o cápsula de tiempo... No sé, creo que es un catalizador de vivencias. Y aunque parezca utópico, creo que con la palabra se puede cambiar cosas.

- Uno de los temas de este nuevo disco es "No hago rap". ¿Qué hace entonces Rayden?

-Pues lo que siento, para bien o para mal, sin preguntar de dónde viene. Intento ser lo más sincero posible y mostrar mis inquietudes. Cuando afronto el folio en blanco no es porque quiera contar algo, sino porque tengo algo que contar.

- ¿Por qué a ritmo de rap?

-Porque fue el primer estilo de música que me llamó la atención y porque dentro de la comunicación es mi vía para trasladar mi mensaje, pero desde mi propia visión del rap, con más arreglos musicales, incluso con estribillos entonados, pero sin perder ese tinte crítico tanto en lo más reivindicativo como cuando hablo del amor. Me gusta desdoblar el término rap para crear mi propio concepto.

- ¿Y dónde se siente más usted, frente a ese folio en blanco o en el escenario, delante del público?

-Cuando estoy de gira. En el concierto se genera como una relación entre el público y tú, tú aportas y ellos aportan, es como una celebración de la vida. Para mí, la vida es lo que pasa entre canción y canción. Yo prefiero vivirla en un concierto. Ojalá pudiera vivir en un concierto eterno.

- En otros de los temas de "Antónimo" habla de la falta de empatía que tenemos.

-Creo que igual que con la aparición de la calculadora dejamos de hacer operaciones de memoria y con la agenda dejamos de recordar números de teléfono, con las aplicaciones para socializar como las redes sociales se está produciendo justamente lo contrario: cada vez somos más asociales.

- ¿Es contrario a las redes sociales?

-No, sería hipócrita porque gracias a las redes sociales he conseguido llegar a más gente, pero todo lo bueno tiene un punto malo y el malo de las redes sociales quizá sea este.

- ¿Ponemos demasiadas etiquetas a las cosas?

-Sí, pero creo que es porque necesitamos identificar todo lo que no conocemos para llevarlo al raciocinio.