Es tiempo de entroido en la provincia de Ourense, y con especial referencia tradicional Verín, en donde ayer aparecían por primera vez los cigarróns, y en Xinzo, donde aprovechando el domingo "corredoiro" hicieron acto de presencia las pantallas.
Los cigarróns en Verín acudieron a la salida de misa para convertirse en los protagonistas de una fiesta a la que le queda recorrido. Por su parte, las pantallas no quisieron ser menos. El ciclo festivo del entroido va cubriendo etapas y se prepara para los días grandes, y de ahí que el bullicio festivo en esas dos localidades ourensanas, aprovechando un día soleado, superase las previsiones más optimistas. Falta por llegar la salida oficial de los peliqueiros de Laza, para de esa forma cerrar el triángulo mágico del entroido ourensanos. Un peregrinaje que cada año cuenta con más visitantes. Pero el entroido irradia por toda la provincia, como es el caso de Vilariño de Conso y Viana do Bolo, con los Boteiros, y Manzaneda, con sus "Mazcaras", sus regueifas y folións o fuliones, en la zona oriental. Los "troteiros" de Bande, que se adelantaron a la jornada del sábado.
