Jessica Whelan es una niña británica de cuatro años que sufre un cáncer muy agresivo y su padre, electricista y fotógrafo aficionado, ha querido retratar y dar a conocer la dura batalla que lleva a cabo la pequeña contra la enfermedad.

La niña sufre un neuroblastoma y el tratamiento que ha recibido finalizó recientemente sin los resultados esperados. Los médicos han dado tan solo unas semanas de vida a Jessica. "Hace unos días le dieron sólo unas pocas semanas de vida después de una batalla contra el cáncer que se ha librado durante más de doce meses", escribió Andy Whelan en su página de Facebook.

Las imágenes publicadas por Andy en la red social son realmente duras, pero él justifica su publicación porque "es importante la captura de la verdad y la realidad de una situación. Demasiado fácil es capturar la alegría de la vida, descartando la tortura que vemos".

La foto en la que Jessica aparece retorciéndose de dolor "es la verdadera cara del cáncer", señala su padre. Más allá de ofender o provocar compasión, Andy aclara que lo que pretende es concienciar sobre la enfermedad. "Tal vez al ver esta foto la gente que no está en nuestra posición sea consciente de la oscuridad que es el cáncer infantil, y tal vez estas mismas personas puedan ser capaces de hacer algo al respecto para que en el futuro ningún niño tenga que sufrir este dolor", explica.

La página de Facebook en la que Andy explica la historia de su hija cuenta ya con miles de seguidores, y la sobrecogedora imagen se ha convertido en viral.