El Ministerio de Defensa ha hecho públicos 80 informes desclasificados de "Expedientes ovni" en toda España. Cuatro de los supuestos avistamientos sucedieron en Galicia entre los años 60 y 90. Defensa comenzó hace más de dos décadas a revelar este tipo de expedientes pero hasta la fecha su consulta tan solo se podía hacer físicamente, en la sede del Ejército del Aire en Madrid. Ahora están disponibles para su consulta a través de Internet. En ellos, se respeta la identidad de los denunciantes de cada caso.

El primero de los informes situados en Galicia se data en Ferrol, el 2 de abril de 1966. En él se describe como a las once y media de la noche un cabo primero junto a otras personas observa en el cielo "un objeto voluminoso de luz opaca, que varía de forma cada 5 minutos aproximadamente". Media hora antes un marinero también alerta de la presencia de este objeto, según recoge el documento. Tras estas notificaciones no se realizó una investigación debido a "la carencia de los datos más elementales". Sí se adjunta una foto hecha a la extraña luz, donde solo se aprecia una mancha sobre un fondo negro, y un croquis que describe lo visto.

La Biblioteca Virtual de Defensa ha digitalizado también el expediente 690402, referente al avistamiento en Becerreá en 1969 de "un objeto de forma de bala, de 2 m. de diámetro y 5/6 m. de longitud". Añade además que, según un testigo, la superficie estaba "compuesta de escamas (gresite) de múltiples colores, e iluminada de forma extraña. El objeto estaba inmóvil y a una altura muy próxima al suelo". Fue un conductor que circulaba por el kilómetro 476 de la carretera Madrid-Ferrol, entre Becerreá y Lugo, el que lo divisó a las ocho de la tarde. El hombre intentó acercarse al objeto pero este desapareció.

El informe proporciona una posible explicación a esta luz: "Aunque se carece de datos puntuales sobre el lugar del avistamiento, la zona es rica en 'peñas' graníticas, con fuerte componente de mica y muy erosionadas, lo que les proporciona contornos redondeados de múltiples formas (en general ovoides irregulares). Con las lógicas reservas, debido a la falta de datos concluyentes, el fenómeno observado sugiere una ilusión óptica originada por el reflejo del sol en una roca granítica". Se adjunta además una carta donde el testigo describe el momento del encuentro y en la que escribe apreciaciones como "creo se trata de una nave tripulada, por hallarse tan cerca del suelo y baja que la cumbre de la montaña".

Los dos últimos informes se redactaron en Noia en años diferentes. El primero, de 1989, comunica "la presencia de un OVNI en Santiago de Compostela y La Coruña" a las 18.48 horas. Las características del objeto son "forma lenticular navega a poca velocidad y tiene gran aparatosidad de luces con tonos brillantes y cambios de las mismas". Tras esto, recoge que se disparan las alarmas de radio en las frecuencias de emergencias "teniendo interferencias". A las 20.40 horas se detecta "la presencia de tres objetos" a diferentes niveles de vuelo. Unos 20 minutos más tarde estos desaparecen y el informe se cierra sin investigación.

En 1989 un grupo de cinco personas, un teniente coronel y cuatro soldados, informan del último avistamiento. Se trata de una "traza visual formada por un núcleo de color verde y una estela en ignición de color blanco amarillento". El oficial llega a la conclusión de que el fenómeno, de entre tres y cuatro segundos de duración y que llevaba una "velocidad vertiginosa", podría tratarse de un meteorito y también da por cerrado el suceso.