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Nueva vía de tratamiento para el virus del sida

Hacia una 'cura funcional' del VIH

Científicos británicos aseguran haber eliminado el virus de pacientes en remisión que toman antirretrovirales -"No es una cura real, evitas que ataque", dicen expertos gallegos

Hacia una 'cura funcional' del VIH

Un equipo de científicos británicos logra una "curación funcional" de pacientes con el virus del VIH. Una nueva terapia aplicada a esta enfermedad con la que conviven 36,7 millones de personas en el mundo -según datos de la ONU de 2015- consigue que el virus se quede más tiempo en estado de latencia y no se manifieste. Este tratamiento, supervisado por investigadores de las universidades de Oxford, Cambridge, el Imperial College, el University College y el King's College de Londres, se basa en el empleo de un medicamento que ya se emplea actualmente para tratar a pacientes con cáncer. El fármaco en cuestión es un citostático que se utiliza en tratamientos de quimioterapia para el tratamiento de distintos tumores y su nombre técnico es Vorinostat.

"En las personas con VIH hay que hablar de varios tipos de curación. Hay una curación exteriorizante, la que arreglaría todo el problema; otra es la curación funcional, que no es capaz de desmontar el provirus -la información genética del virus- pero en la práctica estás curado aunque realmente no lo estés; y después está la remisión, que es lo que realmente hemos conseguido con los tratamientos de antirretrovirales, que logran hacer remitir la enfermedad y que los pacientes vivan veinte o veinticinco años más de lo que vivirían si no se tratasen", explica Benito Regueiro, jefe del servicio de microbiología del Complexo Hospitalario Universitario de Vigo (CHUVI).

Con los antirretrovirales se destruye el virus en circulación y el paciente mejora, pero cuando el virus entra en remisión, cierta cantidad de él se queda en las células en estado de latencia y, de vez en cuando, vuelve a brotar. "La complejidad añadida de este virus recae en que se si divide, muta; y al mutar se hace resistente al fármaco", cuenta Regueiro.

Los enfermos inicialmente responden bien al tratamiento hasta que, por una mutación del virus, se vuelven resistentes a esta droga y hay que cambiarla por otra hasta que se vuelva a repetir el proceso. De este modo se consigue mantener al paciente vivo ahora.

El tratamiento que los científicos de Reino Unido han probado en 50 pacientes es un inhibidor pero de un componente de las células, no del virus del VIH. "Este producto se utilizaba como anticancerígeno y funciona bien con ciertos tipos de leucemia. Lo que han conseguido con este Vorinostat es que cuando se lo das a pacientes con VIH que están siendo tratados con antirretrovirales y, por tanto, en fase de remisión -cuyas células tienen el virus en estado latente- se logra que esas células (al administrarles este medicamento) eliminen el virus. Con lo cual, agotas las posibilidades que tiene el virus de mutar y poder atacar de nuevo. Realmente el virus VIH no se cura, es una curación a nivel funcional", destaca el médico del Hospital Álvaro Cunqueiro.

En la investigación coordinada desde estas facultades británicas se estableció primero una vacuna que ayuda a identificar las células infectadas con el virus del sida para poder, posteriormente, utilizar el fármaco que provoca que las células eliminen el provirus que permanece en estado latente en su interior.

Los pacientes del estudio llevado a cabo en Reino Unido tendrán que seguir tomando antirretrovirales pero la investigación avanzará a partir de ahora. "Probablemente se alargarán los periodos de remisión de los pacientes que se traten con este Vorinostat y, en teoría, podría haber casos en los que hubiese una eliminación de los datos genéticos del provirus. Y esa sí sería la cura esterilizante, la cura real", apunta Regueiro.

La ventaja de este tratamiento es que ya está aprobado y se conoce cómo administrarlo a los pacientes, por tanto podría popularizarse su uso con una mayor celeridad. En todo caso, este es un estudio inicial. Hay que vigilar la evolución de los 50 pacientes.

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