Después de que el calor fuese el gran protagonista del inicio de agosto, la niebla llega a las Rías Baixas con el objetivo de quedarse. Durante toda la mañana, la niebla cubrió la ría de Vigo y otras comarcas de la provincia de Pontevedra, provocando un descenso de las temperaturas. Por la tarde, las previsiones apuntan a que habrá nubes de evolución en zonas del interior gallego, como Ourense y Lugo, y no se descartan tormentas.

Pero la niebla solo será el comienzo de un empeoramiento progresivo del tiempo que traerá lluvias la semana que viene. Mañana comenzará a perder fuerza el anticiclón y el aire frío llegará a Galicia. El cielo estará nublado y aparecerán chubascos puntuales en Lugo y Ourense hacia la tarde. En el litoral se esperan nubes y nieblas costeras persistentes. Las temperaturas mínimas apenas experimentarán cambios, pero las máximas descenderán hasta los 23º en el caso de Vigo.

La situación empeorará de cara al martes y miércoles con la llegada de una borrasca centrada sobre el Atlántico Norte que acercará un frente débil que impedirá que luzca el sol. El miércoles, se espera que las lluvias sean las protagonistas y podrían quedarse hasta finales de semana.