El Resurrection Fest de Viveiro, evento que cada año trae a tierras gallegas lo mejor del rock, hardcore y metal internacional, logró congregar este fin de semana a más de 80.000 personas, superando las previsiones iniciales de la organización.

La alcaldesa de Viveiro, María Loureiro, trasladó su "enorme satisfacción" por los resultados cosechados por el evento y destacó que Iron Maiden se situó como el grupo "más multitudinario" de todas las ediciones del festival, con una asistencia de "entre 30.000 y 35.000 personas" a su actuación.

"Cumplimos todas las expectativas, esperábamos cerca de 80.000 personas y así fue, un éxito", celebró la edil, además de aprovechar para felicitar a la organización, a los funcionarios del ayuntamiento y al dispositivo desplegado de la Policía Local de Viveiro.

Loureiro, a falta de una valoración definitiva, confió también en que se superen los más de seis millones de euros logrados en la edición de 2015. "La repercusión económica es importante, no solo en el ayuntamiento de Viveiro sino en toda la comarca.

Nosotros teníamos las acampadas cubiertas, los hoteles repletos y hubo gente que tuvo que hospedarse en ayuntamientos limítrofes. Supone una inyección económica para toda la comarca", resaltó.

Durante los cuatro días de cartel, además de Iron Maiden, pasaron por el festival de Viveiro bandas como The Offspring, Hamlet, Bad Religion, Volbeat, Bullet For My Valentine, Abbath y Graveyard, entre otras.