Ser un 'nini', un joven que ni estudia, ni trabaja, ni busca empleo, ha llevado a un vigués de 19 años a perder la pensión alimenticia que recibía de su progenitor desde que sus padres se divorciaron. Además, el joven y su madre pierden el derecho de uso de la vivienda familiar en la que residían y que es propiedad del padre. Ambos tienen un plazo de seis meses para mudarse, a tenor del fallo dictado por la Sección Sexta de la Audiencia con sede en Vigo. El tribunal confirma en todos sus extremos la sentencia dictada por el Juzgado de Instancia 5, si bien el cambio de domicilio no será inmediato y da un plazo de medio año para que busquen una nueva vivienda.
El padre solicitó la extinción de la pensión alimenticia de su hijo un año después de que cumpliera la mayoría de edad. La juez le dio la razón porque el chico abandonó con 15 años los estudios "y se negó seguir estudiando"; además "ni trabaja ni ha trabajado, ni aprendido oficio alguno, ni en suma, se ha interesado por buscar ocupación de tipo alguno.
La vivienda en que residen madre e hijo, que fue también el domicilio conyugal, era de los abuelos paternos. Ante la mayoría de edad de su hijo y cesando la situación de custodia sobre él, su padre la reclamó. La juez ha aceptado reintegrársela porque su exmujer no aportó "ninguna prueba" para acreditar "que su interés es más digno de protección que el del demandante".
