Katza llegó por primera vez a Galicia cuando tenía ocho años. La familia formada por los vigueses Ángel Pérez, Lúa Pereira y su hija Lei Jing la acogen desde hace cinco veranos en su hogar y para la pequeña Lei Jing ya es como una "hermana mayor". El próximo 26 de junio regresa a Vigo y sus padres de acogida aseguran que está deseando. "El invierno en Rusia es muy duro; soportan un frío extremo, de hasta 30 grados bajo cero, y esta zona en la que residen es bastante rural, por lo que la mayor parte del tiempo lo pasan metidos en casa", cuenta Ángel.
La llegada de Katza el primer verano no fue fácil. "El primer día se echó a llorar; todo era nuevo para ella, pero en seguida se adaptó y empezó a hablar unas palabras en español. Ahora incluso lee en español", cuenta el padre, que asegura que durante el invierno se llaman bastante a menudo. "Se marcha siempre con kilos de más y se le nota especialmente que mejora en el brillo del pelo; no podemos solucionar todos sus problemas, pero al menos es una ayuda", concluye.
