Los padres de la "exsuperiora" del convento de Vilariño y pseudomonja Ivana María y de Miriam Lima Santana comparecieron en la mañana de ayer ante la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número Uno de Tui, ratificando sus declaraciones como testigos y perjudicados, pues consideran que sus hijas son "víctimas" dentro de la causa que se investiga en relación a la disuelta Orden y Mandato de San Miguel Arcángel que tuvo su sede en Oia, y que se sigue por supuestos delitos de asociación ilícita, delito contra la Hacienda Pública y, en el caso del fundador de la supuesta secta, Feliciano Miguel Rosendo da Silva, por esos delitos y por el de abuso sexual.

El matrimonio vigués tiene como consuegro a Miguel Rosendo, pues el hijo de éste está casado con su hija Miriam y tienen dos hijos.

La pareja llegó ayer hasta el edificio de los Juzgados de Tui sobre las nueve y cinco de la mañana, bajo un paraguas, tapados con ropas de abrigo, ocultando las caras. El marido fue el primero en testificar y, según manifestó la abogada de la acusación, Ana Reguera, representante de víctimas y perjudicados, se ratificó en lo declarado en su día.

La mujer, que no había testificado antes ante el Juzgado, inició su declaración, pero una indisposición le impidió finalizarla, por lo que se fijará otro día y hora para hacerlo.

La abogada defensora de Rosendo, Teresa Quintana-Drake, hizo referencia a que "las declaraciones, bien", pero que fue necesario suspender la que realizaba la madre, al sentirse mal.

Piden justicia

Ambos habían manifestado públicamente, tiempo atrás, su convicción de que "los pasos que está dando la Justicia es lo que buscábamos con nuestras denuncias para poder tener a nuestras hijas cerca". Su deseo es que "la justicia siga su camino y separe a mis hijas de ese personaje", dijeron entonces.

Su hija Ivana María, es superiora del convento de Vilariño, pertenecía a la organización de Rosendo y se consideraba una persona de su confianza. La mediana, Miriam, es la casada con el hijo del líder.

El matrimonio vigués, que pudo recuperar a su tercera hija, la menor, expuso tiempo atrás su convicción de que sus dos hijas y sus nietos son "víctimas", por lo que precisarían de tratamiento psicológico para apartarse de la organización.

Las 21 declaraciones dispuestas por la juez de Tui proseguirán a finales de este mes y se prolongarán hasta junio, para escuchar los testimonios de testigos y personas perjudicadas. Hay un total de 13 personas imputadas.

Miguel Rosendo sigue en la prisión de Teixeiro desde 2014. Según su abogada, asiste a talleres e incluso ayuda a otros presos.