En la charla no podía faltar el recuerdo del periodista Garpar Rosety, fallecido en la madrugada del pasado domingo día 6 tras sufrir una caída en la calle. Vicente Ferrer Molina contó -como así figura en la introducción de la biografía- que el que fuera narrador de los partidos del Real Madrid y de la Selección Española bajo el mando de José María García en Antena3 Radio no quiso aportar sus impresiones para el libro. "Quería tanto a García que exigía más reciprocidad", explicó. La admiración y el cariño eran mutuos y García le reconocía como el mejor narrador, un maestro al que incluso le surgieron imitadores, como a su jefe. Sin embargo, Rosety tomó su propio camino cuando García se fue de Antena3 en 1992. "Cuando le tuvo enfrente como un competidor más, García fue a por él a saco, y eso a Rosety le dolió bastante". Sin embargo -reveló-, se vieron hace poco. García acudió ayer al tanatorio para dar el pésame a sus familiares, una costumbre que no elude nunca.

Ferrer Molina habló también de las idas y venidas de García con Jesús Gil, el que fuera presidente del Atlético de Madrid, con el que se reconcilió tras haberle llamado "patán descerebrado" y otras lindezas. Otro dirigente deportivo que fue objeto de sus diatribas fue Ramón Mendoza, el presidente del Real Madrid. Traspasando todos los límites de la ética, llegó a leer en antena el parte médico de la que había sido su esposa, Jeanine Giraud, que padecía cáncer. "Luego José María García padeció cáncer y eso le humanizó mucho", recordó Ferrer Molina.

Del periodista Luis Herrero se distanció tras la muerte de Antonio Herrero, y con Miguel Indurain tuvo un momento muy tenso cuando el ciclista rechazó por tres veces responder una pregunta suya sobre el dopaje.