Remedios Gomis es asesora del amor. En Estados Unidos es de lo más normal recurrir a una "love coach" para que ayude a la gente a encontrar pareja, pero no cualquier pareja, sino el amor de tu vida, la pareja ideal. La mismísima Katie Holmes lo hizo tras su divorcio de Tom Cruise. Gomis, con más de veinte años de experiencia en este campo, acaba de publicar "All you need is love" en la que explica cómo dar con el amor verdadero en ocho pasos y asegura que el método es infalible si la persona se compromete con el proceso.
-¿Quién recurre a un "love coach" para enamorarse?
-Puede recurrir cualquier persona que quiera saber por qué hasta ahora no ha tenido éxito en sus relaciones o porqué ha ido acumulando fracasos en el amor. Cualquier persona que quiera aprender a tener más carisma, más seducción, aprovechar su lenguaje corporal y encontrar a una persona con quien compartir la vida y ser feliz puede llemarnos. Personas que buscan a otra persona acorde a ellos y que no quieren volver a fallar.
-¿Todo el mundo puede encontrar a esa persona ideal?
-Sí, lo que ocurre es que muchas veces nos frenamos y hay mucho mar de fondo. En ocasiones decimos que no encontramos lo que estamos buscando o aseguramos que queremos pareja y en el fondo no la queremos. Y otras veces es que no tenemos claro qué perfil de pareja es la que necesitamos y por eso fracasamos.
-Asegura que el amor tiene tanto o más de cabeza que de corazón, ¿y el flechazo?
-A ver, el flechazo existe, la magia está, pero lo que pretendo es que vayamos a buscar el amor pero de la forma más conveniente para no fracasar. Lo que queremos es que sientas el flechazo pero que lo hagas con una persona que comparta contigo más que una atracción física, que es lo que suele pasar cuando buscas el amor al azar. Pero si tú vas enfocando los casos y las personas, entonces ese flechazo es mucho más potente.
-Entonces, para ligar, ¿hay que trabajar?
-Hay que trabajar siempre; antes, para tener claro qué perfil tenemos que buscar, y también para saber dónde tenemos que encontrar a esa persona. Esto es como un trabajo, hay que marcarse los sitios que tenemos que frecuentar, aprender a proyectar carisma, y nunca hay que pensar que está todo hecho. Una vez que nos comprometemos a llevar el trabajo adelante ahí empieza el trabajo duro, y cuando encontramos la pareja no se puede pensar que está todo hecho. Hay que seguir aplicándose para mantener vivo el amor.
-¿Cuántas veces podemos lograr el verdadero amor?
-Enamorar, te puedes enamorar varias veces en la vida, pero el verdadero amor lo conoces una vez en la vida. Puedes tener varias relaciones y estar cinco o diez años con una persona, pero eso no quiere decir que esa persona sea el amor de tu vida. Cuando conoces a esa persona se produce una simbiosis entre almas gemelas, sientes que es la persona amiga y compañera con la que queremos estar el resto de la vida, con la que compartes cosas de la vida cotidiana, y con la que nunca necesitas una tercera persona porque con ella lo tienes todo.
-Y el rechazo, ¿cómo se gestiona?
-Tenemos una concepción errónea del rechazo, porque cuando alguien nos dice que no, no nos está rechazando a nosotros si no que lo que ocurre es que para esa persona no somos el patrón de pareja que está buscando, pero no es contra nosotros. Yo siempre digo que el rechazo hay que gestionarlo como un reto, no tomárselo como una decepción, tiene que servirnos para aplicarnos y superarnos la próxima vez que busquemos el amor. Tenemos que aprender de ello.
-La gente sola, ¿quiere estar sola o no sabe estar en pareja?
-Hay de todo, hay gente que está sola porque dice: "yo quiero pareja porque no quiero estar sola", pero luego a la hora de la verdad cuando entra en esa posibilidad se da cuenta de que no quiere nada que invada su espacio, porque hay que compartir decisiones y estar dispuesto a ceder una parte. Pero hay muchas personas que no están solas por decisión propia, cuando la soledad no es autoimpuesta es cuando hay que luchar por lograr el amor y ponerse manos a la obra.
-¿Internet deshumaniza el amor?
-Es una herramienta como cualquier otra para conocer gente, quizás internet nos puede facilitar relacionarnos con otras personas por el ritmo frenético que llevamos, pero hay que tener cuidado. Hay que saber cómo hacer un perfil, como utilizar las redes sociales y como vendernos, porque a veces nos centramos más en ver lo que buscamos que en remarcar que es lo que ofrecemos.
