Salir a correr está en boga, entre otras razones porque es una práctica adaptable a las necesidades de cada uno y barata. Pero con el incremento de corredores -o empleando el anglicismo, runners- también están aumentando los casos de lesiones en los pies, especialmente en el talón de Aquiles, alerta según Borja Pérez, presidente del Colegio de Podólogos de Galicia. Por ello, el organismo colegiado recomienda a los corredores que se realicen un estudio biomecánico de la pisada antes de cazarse las zapatillas para evitar posible lesiones..

"Está habiendo un repunte importante de consultas relacionadas con lesiones provocadas por esta práctica deportiva, igual que lo hubo hace unos años por el padel", afirma el podólogo, que detalla que las lesiones tendiniosas son las más comunes en el corredor, especialmente en el tendón de Aquiles, la zona del talón y en la zona del arco del pie (fascitis plantar), en los tendones peroneos en la zona delantera del pie y en el tendón tibial posterior en la zona interna de la pierna. Todas estas lesiones están ocasionadas por desequilibrios musculares, esguinces, traumas directos sobre el talón de Aquiles y sobreesfuerzos.

"Pero además, la sintomalogía de estar pisando mal puede aparecer no en el pie, sino en la espalda y cadera", alerta el presidente del Colegio de Podólogos de Galicia.

Para evitar estas lesiones, los especialistas gallegos recomiendan a los futuros corredores que se realicen un estudio biomédico en una clínica de podología para conocer en qué condiciones trabajan las extremidades, prevenir lesiones y poder elegir el calzado apropiado a cada persona.

Gestos y lesiones

"El pie y la zapatilla son la base mecánica del entrenamiento del corredor y suponen el punto de conexión entre su cuerpo y el suelo. El gesto deportivo del corredor más determinante es su pisada. El análisis de la pisada en el corredor aporta información muy importante acerca de cuáles son las fuerzas y los movimientos que experimenta el pie al correr", explica el representante de los podólogos gallegos.

En este sentido, añade que carrera es un deporte cíclico y de impacto sobre el pie y el miembro inferior. Los podólogos indican que las lesiones comienzan cuando este gesto deportivo está ejerciendo un estrés excesivo en una estructura anatómica determinada que sobrepasa su límite tolerable de estrés, lo que puede derivar en la aparición de algún tipo de lesión.

Estas situaciones de estrés mantenidas pueden resultar en lesiones por sobreesfuerzo si se sobrepasa el nivel de estrés tolerable por el tejido. El doctor Pérez explica que la curación de estas lesiones en el corredor pasa por tomar medidas para disminuir dicho estrés para conseguir la curación del tejido lesionado. "Las plantillas hechas a medida para modificar la función anormal del pie son un método de tratamiento muy adecuado para disminuir el estrés en los tejidos favoreciendo su curación", explica. Sin embargo, determinar si el corredor pisa hacia la derecha o a la izquierda no es suficiente para determinar qué zapatilla es la más adecuada, ya que en la pisada intervienen otros mecanimos, recuerda el especialista, e insiste: "Con la zapatilla adecuada se reduce la tensión en el tendón de Aquiles y se mejora la amortiguación".