Investigadores de la Facultad de Psicología de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) han desarrollado una herramienta web capaz de detectar el acoso escolar en solo diez minutos. El programa se llama "Mybullying" y no solo genera un mapa de la red social del aula, sino que propone las pautas de intervención para evitar el aislamiento de los estudiantes más vulnerables y acabar con el acoso escolar, si se da el caso.
En unos 10 minutos, los alumnos deben responder a preguntas como: "¿Quiénes son tus amigos dentro de clase"; "¿Con quién te juntas habitualmente?"; "¿Con quién no sueles relacionarte?"; "A algún compañero o compañera ¿le pegan o maltratan físicamente?"; "¿Le aíslan, rechazan y/o hablan mal de él o ella?"; "¿Te lo hacen a ti?". Con las respuestas, la aplicación confecciona un mapa social de clase en el que se representan los posibles casos de acoso escolar. Cada alumno se representa con un icono y se agrupa en función de las respuestas dadas. De esta forma, se van presentando los distintos subgrupos formados en el aula, y los alumnos aislados y rechazados. Los alumnos que aparecen separados son los suceptibles de sufrir acoso escolar.
"La aplicación de la prueba es sencilla y la pueden realizar los tutores mediante una evaluación colectiva por grupos de clase en el aula de informática", explica Javier Martín, profesor de Psicología Evolutiva y de la Educación de la UCM y autor principal del programa, que empezará a implantarse a mediados de este mismo mes en 700 centros educativos de la Comunidad de Madrid con el objetivo de ampliarla a los cerca de 2.000 centros de esa comunidad durante el próximo curso escolar.
Para Manuela del Palacio, presidenta de la Sección de Educación del Colegio Oficial de Psicología de Galicia (COPG), "Mybullying" puede ser una valiosa herramienta para detectar y actuar sobre casos de acoso escolar, aunque, matiza, son necesarios otros recursos para conseguir erradicar este problema de las aulas. "Todas las herramientas y estrategias que tengamos para prevenir y actuar en estos casos están muy bien, pero desde el colegio también reivindicamos la formación sobre acoso escolar de docentes y orientadores escolares. Falta formación porque la gente le pone ilusión a las cosas, pero hace falta algo más que la voluntad que le pongas", afirma la experta gallega, que asegura que las críticas sobre que los centros miran hacia otro lado en los casos de acoso escolar son "absolutamente falsas". "Los profesionales están muy sensibilizados con este problema", asegura.
En este sentido, la psicóloga, orientadora en un centro de Secundaria, recuerda que desde 2013 Galicia tiene un protocolo para la prevención del acoso escolar y el ciberacoso, una herramienta importante, pero sobre la que no se ha formado al personal docente. "Sacaron un protocolo general de acoso escolar, de 106 páginas, y lo dieron a los colegios para que cada uno lo ajuste a sus necesidades. ¿Quién coge los 106 folios, se los lee y los adapta? En mi colegio fue el equipo directivo, pero no se trata solo de hacer un protocolo para que lo cumplas, sino de formar a profesores y orientadores. Desde el Colegio hemos hecho talleres de prevención del acoso escolar, pero nosotros exigimos que la Xunta los haga en los centros".
Basada en el famoso KiVa finlandés
- "Mybullying" se puede utilizar desde 3º de primaria hasta bachillerato y se basa en modelos similares a otros programas antiacoso como el KiVa, desarrollado en Finlandia en más de mil centros educativos con gran éxito y que están importando otros países, como Francia. La herramienta desarrollada por los investigadores de la Complutense se testó en 200 centros de Castilla y León entre 2005 y 2010 con un balance "bastante positivo", según el autor principal del programa. La principal evolución de "Mybullying" en este tiempo es la reducción del número de preguntas que tienen que responder los estudiantes.A partir de las respuestas a estas preguntas, la herramienta genera un mapa del aula y un informe sobre cómo realizar el procedimiento de ayuda entre iguales, una ayuda que implica la colaboración de los estudiantes prosociales y con un alto estatus en el grupo. También se pide la colaboración de amigos y compañeros del alumno excluido del grupo con quienes tenga cierta afinidad. La finalidad última es que se sienta respaldado y crear una red social que se sostenga en el tiempo."El apoyo del grupo es importante para romper con el aislamiento y también con el miedo, que impide actuar en muchos casos al acosado", afirma la Manuela del Palacio, para quien lo más difícil del acoso escolar es conseguir que la víctima rompa su silencio. "Muchas veces detectas el problema o lo intuyes, pero otras ni te das cuenta y es porque el acosado no se lo cuenta a nadie, ni en casa ni en la escuela, ni tampoco sus compañeros ni sus amigos. Hay que romper con este silencio", asegura.
