"Naufragar no mar que baña a casa" es el título de la segunda entrega del programa "Náufragos", una producción de Produccións Celta, perteneciente al FARO y A Opinión, que TVG emitirá mañana a las 15.30 horas. Este capítulo narra las historias del "Ave del mar" de Moaña y del "Virxe de Loreto" de Ribeira. En el naufragio del primero murieron 26 hombres al hundirse después de tocar en unos bajos en las Islas Cíes. Fui una tragedia que dejó marcada a la vida de Moaña y a toda la península do Morrazo. El pesquero "Virxe de Loreto", por su parte, también tocó con unos fondos frente al faro de Carrubedo, pero en este caso sus dos tripulantes, los hermanos Manuel y Miguel Pérez Romero, sí lograron salvar la vida al ser rescatados por el pesquero "O Petón".

El "Ave del mar", con base en el puerto de Moaña, regresaba a casa después del trabajo de pesca de la sardina, el 10 de noviembre de 1956, y al enfilar la puerta natural de la ría de Vigo, marcada por las Islas Cíes, el barco toca con unos bajos cerca de la isla de San Martiño y se hunde. Todos sus tripulantes, 26, fallecen en el trágico accidente. El naufragio de este barco marcó a toda la comarca, pero especialmente para los niños, muchos de los cuales, además, tuvieron que vivir fuera en un internado para huérfanos. De su experiencia hablarán para el programa los hijos de os náufragos Luis Entenza y Pepe Caramuxo, que tenían ocho años cuando sucedió el naufragio y que fueron internados en el colegio para huérfanos del mar de Panxón.

También fue internada, en su caso en el centro para huérfanas del mar de Sada Mucha da Fraga, hija de otro náufrago del "Ave del mar", que recordará cuando con siete años vio marcharse a su padre a faenar para no volver a verlo nunca más.

El hijo de Manuel Eiroa, Julio, tenía ya 21 años y trabajaba en el mar, empezaba con su padre y tras su fallecimiento, tuvo que asumir el papel de cabeza de familia y enfrentarse a momentos especialmente difíciles, como con los problemas que surgieron para enterrar a su padre, al no tener dinero para hacerlo. Pero no estuvo solo; los vecinos de Moaña supieron ser solidarios con las familias de los náufragos. En la isla de San Martiño, los marineros de Moaña colocaron una cruz en recuerdo de las víctimas.

Desde el puerto de Aguiño, el "Virxe de Loreto" salieron Manuel y Miguel Pérez un 12 de abril de 2007 a pescar pulpo cerca del faro de Carrubedo, donde el barco se hundió, aunque los dos hermanos aguantaron en el agua y sobrevivieron. Ahora, Manuel rememora ese día ante las cámaras de "Náufragos".

Actualmente, trabaja como patrón de lancha de salvamento marítimo de la Cruz Roja de Ribeira. El patrón del barco que rescató a los dos hermanos, "O Petón", Juan Pego, también recuerda cómo fue el rescate.