"La guerra era un negocio también en aquel tiempo"

Narra Arsenal un suceso ocurrido en la España medieval relacionado con el verdadero Braveheart, el rey escocés Robert the Bruce, y su fiel servidor James Douglas, que cayó en agosto de 1330 junto con muchos de sus caballeros, en un combate durante el asedio de la fortaleza granadina de Teba. "Bruce -dijo- era en realidad uno de tantos que sirvió al rey inglés Eduardo I pero que acabó por el devenir de las cosas siendo uno de los "guardianes de Escocia". Una abierta competencia con otro "guardián" la resuelve matándolo en una Iglesia, lo que le resuelve el problema y le convierte en rey de Escocia pero que, en la mentalidad religiosa de la época, le supone una condenación eterna. Para expiarla decide marchar a luchar contra el infiel en Tierra Santa pero la lepra lo lleva al lecho de muerte y pide a sus leales que, si no puede ir él, lleven en un relicario su corazón a la guerra contra el moro. Su fiel Douglas fue quien lo llevó".

Pasa con sus huestes por Inglaterra, llegan al continente europeo y antes de partir para Tierra santa se dirigen a Compostela a ganar indulgencia. Allí es donde se enteran que la Corona de Castilla está en lucha contra el infiel del reino de Granada, lo que el Papa había declarado como Cruzada. Y hacia allá se dirigen, sumándose a la guerra de Alfonso XI. Los escoceses son instruidos por los españoles en el distinto modo de luchar en tierras tan cálidas en que las grandes armaduras son insoportables y en las que se cabalga" a la jineta" y se practican tácticas como el "tornafuye", una huida para volver de repente y rodear al enemigo. A pesar de ello en una de esas tácticas cayeron todos los escoceses.

"Con la muerte de Douglas -dijo- se perdió la reliquia que llevaba al cuello, dentro de un cofrecito, que Alfonso XI mandó buscar. No se sabe nada mas, pero sí que apareció tal cofre en su tumba sin el corazón ¿Quién lo había llevado allí? Eso es parte de la recreación de mi novela".

El comienzo de la novela se sitúa en agosto de 1330 con el rey Alfonso XI de Castilla al frente de un inmenso ejército formado "por las huestes del rey, las de algunos ricohombres, las tropas de las órdenes militares, las milicias de varias poblaciones, contingente cruzados extranjeros y bandas de aventureros que se habían unido a la campaña al olor de la guerra y el botín", cruzando la frontera con Granada y dirigiéndose a la conquista de Teba, en su campaña por recortar los territorios del reino nazarí de Granada.

Dentro de este peculiar ejército se encuentra el noble escocés. La llegada de Douglas es bien recibida por el rey Alfonso que le sitúa al mando de las tropas extranjeras. Pero las tropas de Douglas caen en una emboscada de los bereberes tras lanzar éste por delante el corazón que portaba y lanzarse al combate. Perder tal reliquia era para el rey Alfonso XI como un deshonor, un vilipendio . y ordenó hallarla como fuere". "No podemos juzgar a la gente de aquel tiempo como a la actual. Sus parámetros eran diferentes, eran capaces de grandes crueldades y al mismo tiempo de una gran espiritualidad o de defender una honorabilidad entre los que se ededicaban a las armas. Para ellos el mundo de lo divino o infernal está muy cercano".

Habló el autor de la gaita escocesa que aparece en la película "inexistente entonces en Escocia porque aún no había llegado desde Galicia", del significado de los emblemas heráldicos en aquellas guerras... "La guerra era también un negocio. En la base, la gente sin medios iba a buscarse la vida con riesgo de muerte en ella. Si no te mataban tenían la soldada, podía conseguir un terreno..."