La viuda de John Lennon, Yoko Ono, cree que el mensaje de paz del músico es ahora "más necesario que nunca", por lo que se ha ocupado de la remasterización del catálogo completo del ex-beatle como solista para así conmemorar el 70 aniversario de su nacimiento, que se cumple el 9 de octubre.

"Su espíritu sigue vivo y su energía es más necesaria que nunca en los tiempos inciertos que corren", señaló la controvertida artista japonesa en una entrevista con EFE en Londres.

Supervisado al milímetro por Ono, el macro-lanzamiento 'Gimme Some Truth' (Dame algo de verdad) sale a la venta el 5 de octubre con la reedición de los ocho álbumes del artista en solitario: 'John Lennon/Plastic Ono Band' (1970), 'Imagine' (1971), 'Some Time In New York City' (1972), 'Mind Games' (1973), 'Walls and Bridges' (1974), 'Rock 'n' Roll' (1975), 'Double Fantasy' (1980), y el póstumo 'Milk and Honey' (1984).

"Tengo la responsabilidad de gestionar el legado de John y debo asegurarme de que todo lo que se publica de él se haga de la manera correcta", precisó la artista nipona.

En estos ocho álbumes, Lennon dio rienda suelta a sus reivindicaciones políticas y difundió a través de sus letras su mensaje de paz, que "todavía hoy tiene vigencia", comenta la que fue su inseparable esposa desde que se casaran el 20 de marzo en 1969 en Gibraltar.

"Sus canciones contenían muchas verdades y la verdad es fundamental para alcanzar la felicidad. John muerto sigue escupiéndonos a la cara esas verdades", afirma Ono con un tono amable y un tanto místico que mantiene durante toda la entrevista.

Ono no se atreve a afirmar que el trabajo de Lennon en solitario fuera mejor que con los Beatles, pero sí asegura con rotundidad que en solitario gozó de "mayor libertad creativa para experimentar y componer temas que no pegaban con la banda".

Recuerda a su marido como un compositor prolífico -tenía un piano en cada habitación porque la inspiración podía llegar en cualquier momento- y muy perfeccionista, ya que nunca estaba conforme con lo que hacía.

"Tenía que esconder las cintas en las que grababa las demos porque enseguida grababa otras cosas encima porque pensaba que no merecían la pena", explica.

Según su esposa, Lennon era "un genio", una persona dotada de una sensibilidad especial para transformar situaciones dolorosas e injustas en "bellísimas" canciones, como 'Imagine', tema convertido en todo un himno por la paz.

Ono cuenta que no había escuchado la música de los Beatles hasta que no conoció a Lennon, un "flechazo" que surgió en una galería de arte en Londres, donde la artista conceptual preparaba una exposición con sus trabajos.

"Quiso comprar uno de mis cuadros pero cuando fue a pagarlo se dio cuenta de que no llevaba dinero porque era tan famoso que ni siquiera podía entrar tranquilamente a una tienda", recuerda Ono entre risas.

A partir de ese encuentro casual, Ono se interesó por los Beatles, de los que había oído hablar ocasionalmente y a los que vio por primera vez en la portada de un periódico japonés donde, en plena explosión de la 'Beatlemanía', aparecían "cuatro chicos en traje y con un extraño corte de pelo, que al parecer estaban revolucionando a las jovencitas de medio mundo".

Poco después comenzó su idilio y con él -para muchos por culpa de él- la agónica disolución de la banda más famosa de todos los tiempos, que se selló con la grabación del disco 'Abbey Road' -'Let it be' fue el último en publicarse pero se grabó meses antes que 'Abbey Road'-, cuya foto de portada, la de los cuatro 'beatles' cruzando un paso de peatones de la calle londinense de mismo nombre, es símbolo de ese final.

"Nunca me imaginé que era el final y creo que John tampoco. Pensaba que los Beatles tenían cuerda para rato", puntualiza la artista y asegura que el precio que tuvo que pagar por vivir "a la sombra de un genio" fue el ser considerada la culpable de la separación del grupo.

A partir de entonces, la pareja protagonizó momentos históricos como la actuación de su banda, la Plastic Ono Band, en el Festival de Toronto de 1969 junto con Eric Clapton o la 'bed-in for peace' (en la cama por la paz) durante su luna de miel en un hotel de Amsterdam, bajo los focos de los periodistas.

"Conseguimos que el tema de la paz ocupara las portadas de los periódicos, aunque creo que los periodistas esperaban algo más sexual", bromea la japonesa.

Sus diez años de matrimonio con "el genio" terminaron trágicamente el 8 de diciembre de 1980, con el asesinato del músico frente a su casa en el edificio Dakota de Nueva York, horas después de que la fotógrafa Annie Leibowitz tomara la icónica fotografía en la que aparece desnudo, acurrucado y abrazando a su mujer.