Doblete en Venecia. El director español Alex de la Iglesia hobtuvo ayer, en la 67 edición del de Cine de Venecia, el León de Plata al mejor director y el premio al mejor guión por la película "Balada triste de trompeta", en una ceremonia en la que la directora estadounidense Sofia Coppola logró el León de Oro a la mejor película por "Somewhere", su cuarta cinta.

El director norteamericano Monte Hellman se alzó con el León Especial por toda su trayectoria en el mundo del cine y el polaco Jerzy Skolimowski obtuvo el galardón Especial del Jurado por el filme "Essential Killing".

Por su interpretación en la obra de Skolimowski, Vincent Gallo se hizo con la Copa Volpi al mejor actor, mientras que la franco-griega Ariane Labed recibió el premio a la mejor actriz por su papel en "Attenberg", una cinta dirigida por Athina Rachel Tsangari.

El jurado de este festival estuvo presidido por el director estadounidense Quentin Tarantino, el mexicano Guillermo Arriaga, la lituana Ingeborga Dapkunaite, el francés Arnaud Desplechin, el americano Danny Elfman y los italianos Luca Guadagnino y Gabriele Salvatores.

Un año de éxitos

El director bilbaíno y presidente de la Academia de Cine española, que recibió hace dos meses el Premio Nacional de Cinematografía, sumó ayer dos galardones más a su carrera tras participar en el Festival de Cine de Venecia.

"Balada triste de trompeta", que todavía no se ha estrenado en España, es un retrato de la historia española del siglo XX a través de la mirada de dos payasos, Sergio y Javier, interpretados por los actores Alex de la Torre y Carlos Areces.

El rodaje de la cinta tuvo lugar en Madrid y en los estudios Ciudad de la Luz (Alicante). Se trata, además, del primer filme del director bilbaíno en el que no trabaja junto a Jorge Guerricaechevarria.

"Me hacen una ilusión increíble", asegura el director vasco

El cineasta español Álex de la Iglesia expresó ayer la "increíble ilusión" que siente al haber recibido dos premios en el Festival. "Me dijeron que algo caía y tal, y me hizo mucha ilusión. Pero pensé, no sé, quizá el premio a la persona más entregada, el premio a la persona mas cordial del Festival", dijo De la Iglesia a un grupo de periodistas españoles en Venecia tras recibir sus dos premios.

"No me esperaba guión ni dirección. Me hace una ilusión increíble, sobre todo por lo buenas que eran el resto de las películas", añadió el cineasta, quien aseguró que estos galardones muestran que el cine español "no está tan mal" como dicen.

Con evidentes muestras de alegría por los galardones concedidos por un jurado presidido por el cineasta estadounidense Quentin Tarantino, De la Iglesia explicó que fue escueto en sus agradecimientos al subir a por los galardones porque los largos discursos son algo que "odia" en las ceremonias de premios.

Al recoger el León de Plata, el presidente de la Academia de Cine de España dedicó un especial "grazie" en italiano a Tarantino, ante quien se arrodilló y quien durante el estreno de la película española en la Ciudad de los Canales dio evidentes muestras de disfrutar de su proyección.