"Sólo si somos capaces de garantizar un acceso a la salud en igualdad de condiciones y con calidad pública podremos conseguir que todos los ciudadanos puedan tener derecho igualitario a un derecho humano como es la salud", dijo la secretaria de Estado española para la Cooperación Internacional, Leire Pajin.

Así concluyó Pajin su discurso ante la sesión plenaria de la conferencia, que clausurará esta tarde por el presidente francés, Jacques Chirac, y que cuenta con la participación de casi 50 países, representados por ministros o responsables de Sanidad, Desarrollo o Cooperación, y funcionarios de organismos internacionales.

"Hay una relación evidentemente directa entre la inversión pública en salud y la disminución del impacto en los más pobres", apuntó, por su parte, el ministro de Sanidad de México, José Angel Cordova, quien co-presidió una de las mesas redondas de la jornada.

Para Cordova, que presentó ante el plenario las líneas generales de la reforma sanitaria de su país, "se necesita una reforma política muy integrada para que los recursos que se derivan de otros ámbitos de la administración pública sean canalizados a la salud".

"La universalidad en el acceso (a la sanidad) sumado a una buena organización permite destinar recursos a los más desposeídos y más pobres", dijo, por su parte, la ministra de Sanidad de Chile, Soledad Barría.

La ministra puso también el acento en la "promoción de la salud y la prevención de las enfermedades".

Defensora también del sistema de cobertura sanitaria universal, la ministra de Sanidad de Costa Rica, María Luisa Avila Agüero, estimó igualmente necesario fomentar la prevención.

El objetivo es que "la salud se vea como una cultura de vida y estar dos pasos más adelante de la enfermedad", dijo.

Durante dos días han sido analizados en esta conferencia de París los diversos sistemas de financiación del acceso a los servicios sanitarios, desde la Seguridad Social hasta los seguros médicos privados, así como las experiencias ya lanzadas en ciertos países.

Las conclusiones de la conferencia serán transmitidas al G8 (los siete países más industrializados y Rusia) que, este año, está presidido por Alemania.

Muchos de los participantes en la conferencia destacaron la importancia de la sanidad en las políticas de desarrollo.

"Es muy importante, muy relevante y merece ser destacado la prioridad que esta tomando la salud en la lucha contra la pobreza", se felicitó la ministra de Sanidad chilena.

Se trata de "un momento tremendamente importante", consideró Pajin, ya que "la agenda internacional del desarrollo ha tomado conciencia de la importancia de las cuestiones relacionadas con la salud y la garantía del acceso a la salud para la consecución de los objetivos (de lucha contra la pobreza) del Milenio", dijo Pajin.

"Para poder romper el círculo vicioso entre enfermedad y pobreza y asegurar la cobertura del riesgo de enfermedad en los países en desarrollo tenemos que intervenir en el fortalecimiento institucional de los sistemas públicos de salud", insistió Pajin.

Abogó por "fortalecer los recursos humanos de los países del sur y mejorar los servicios básicos en las comunidades más desfavorecidas, el acceso a los medicamentos, la salud y los derechos sexuales y reproductivos y la salud infantil".

Es igualmente importante "potenciar la investigación y el desarrollo en la salud", concluyó la secretaria de Estado española de Cooperación Internacional.