En pleno desarrollo de la era robótica, las manos de un hombre han sido las responsables de reparar en el espacio exterior el casco del transbordador "Discovery". El astronauta estadounidense Steve Robinson completó ayer con maestría casi artesanal y con éxito los trabajos de reparación de la nave, informó el Centro de Control de Vuelos Espaciales (CCVE) de Rusia.

Un portavoz de la NASA declaró que esta operación, sin precedentes en la historia, fue todo un éxito.

Las reparaciones efectuadas por Robinson en el espacio durante una caminata que llevó a cabo ayer junto con el japonés Sochi Noguchi eran necesarias "para garantizar la seguridad del aterrizaje de la nave espacial", previsto para el próximo 8 de agosto, añadió.

Durante el vuelo de descenso, el "Discovery" alcanzará velocidades de hasta 22.000 kilómetros por hora y en las capas altas de la atmósfera durante algunos segundos virtualmente se convertirá en una bola de fuego debido a la fricción.

Expertos de la agencia espacial estadounidense temían que las protuberancias de al menos dos centímetros formadas por el material alteren el flujo aerodinámico de la nave y, en consecuencia, aumenten el calentamiento del "Discovery" durante su reingreso a la atmósfera terrestre.

La reparación consistió en retirar el material de relleno que se ha salido de su sitio entre las losas de cerámica térmica que recubren el casco del transbordador y que formó dos protuberancias detectadas en el morro de la nave con ayuda del instrumento de inspección (Orbiter Boom Sensor System), equipado con un láser fijado al brazo robótico de la nave.

La labor ocupó al astronauta menos de media hora, pues, según el Centro de Control, "consiguió retirar sin problema, simplemente con las manos", la fibra del relleno de aislamiento térmico que se había salido entre las losas.

Seis horas

Robinson y Noguchi salieron al espacio a las 08.48 GMT, con un retraso de 34 minutos, para una revisión de los sistemas y equipos. Tras casi seis horas de trabajo, regresaron a la Estación Espacial Internacional (ISS, en sus siglas en inglés) con el resto de sus compañeros.

"A las 14.39 GMT los astronautas cerraron la compuerta exterior del transbordador", acoplado a la ISS, agregó un portavoz ruso.

El experto del centro ruso resaltó que durante la caminata de ayer de los astronautas, la tercera desde el sábado pasado, "quedó demostrada la posibilidad de reparar el casco del transbordador".

La fuente no explicó, sin embargo, por qué se redujo la duración de la caminata, que inicialmente era de seis horas y cincuenta minutos.

Además de las reparaciones del casco, los dos astronautas tenían previsto montar una plataforma de almacenaje en la parte exterior del segmento estadounidense Unity de la ISS.