Marina Castaño, viuda del premio nobel gallego Camilo José Cela, ha sido citada a declarar esta mañana en calidad de imputada por presuntos delitos relacionados con la comisión de malversación de fondos públicos, fraude con las subvenciones y apropiación indebida.

El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) ha informado de que la periodista fue convocada ante el juez a las 12:00 horas de la mañana.

Marina Castaño no será la única que acuda a los tribunales a prestar declaración. Al igual que ella, para esta misma jornada la titular del juzgado de instrucción número dos de Padrón (A Coruña) ha llamado a declarar al anterior gerente de la Fundación Cela, Tomás Cavanna.

Las jornadas de declaraciones se ampliarán diversos días. El 22 de julio será el turno del histórico miembro del PP Dositeo Rodríguez; quien aseguró ayer que presentará su dimisión en el caso de que continúe en calidad de imputado, su hija Covadonga Rodríguez, que ocupó un puesto en la directiva, y José Luis D.M.T.

Dositeo Rodríguez, miembro del Consello de Conta y exconselleiro de la época de Fraga, reitera su inocencia afirmando que la acusación contra él es "incorrecta" y asegura que aportará documentos demostrando y justificando sus declaraciones.

En total serán cinco las personas que deban pasar por delante de la juez para contar su versión de lo sucedido en la Fundación.

Marina Castaño fue imputada el pasado 12 de noviembre de 2014. El caso en el que se ha visto implicada está relacionado con un asunto de ingresos por devolución del impuesto del IVA.

En un comunicado emitido el año pasado, esta periodista gallega criticó que se esté orquestando "una causa general" contra ella y tildó de falso que los empleados de la Fundación Camilo José Cela cobrasen su salario con fondos públicos destinados, en un principio, a actividades de este órgano. "Se me ha juzgado sin pruebas y sin oírme," declaraba Marina Castaña hace un año en relación a las acusaciones vertidas sobre ella.

También recordó entonces que las cuentas fueron auditadas anualmente y sometidas a la aprobación del Patronato, que se reunía dos veces al año, conforme a la ley.

Una vecina inicia el caso

A pesar de que la imputación de la viuda y administradora de la Fundación de Camilo José Cela, fuese en 2014, el comienzo de la investigación comienza dos años atrás.

La investigación se había iniciado a raíz de la denuncia presentada por Lola Ramos, una vecina de Padrón, lugar donde está ubicada desde el año 1991 la institución. Ramos había aportado a la Fiscalía gallega información relativa a supuestos trasvases de dinero efectuados entre la fundación, sin ánimo de lucro, y sociedades propiedad de Cela y Castaño.

A mediados de 2012, el fiscal de Santiago, Álvaro García Ortiz, había denunciado a Castaño y al ex gerente de la Fundación Cela por un supuesto delito de malversación de caudales públicos.

La denuncia detectaba también "base" para investigar la posible comisión de delitos de estafa, apropiación indebida y otros, como fraude fiscal, por el desvío a una sociedad privada de las devoluciones del IVA de la Fundación Cela, que está exenta de tributación, así como por cargar a esta entidad cultural gastos privados.