El parto y el post-parto es una etapa muy significativa en la vida de una mujer que decide ser madre. Se da por hecho que gracias a la medicina, la mujer pasa por este trance sin secuela, pero lo cierto es que se necesita mucha fuerza.

Tal como afirma la fotógrafa Jenny Lewis, su colección ´Un día de vida´ cuenta una historia sobre la resistencia de las mujeres post-parto: "Siento que en gran parte no está reconocida". Además, sus fotos que reflejan la inmensa ternura que existe entre una madre y su bebé son un mensaje de Lewis para tranquilizar a las futuras mamás: "el parto está bien; sí, es doloroso, pero es un dolor positivo, uno que tiene un propósito y es sólo una parte del viaje, un rito de paso a la maternidad".

Su proyecto recoge las primeras veinticuatro horas de vida de una persona, cuando el cuerpo de una mujer está envuelto por las hormonas, para capturar la fisicalidad implacable del momento, directamente desde el campo de batalla.

"El sudor aun brillando en la piel de la madre, el cordón umbilical translúcido, recién cortado, y la maravilla con los ojos abiertos como las mujeres llegan a un acuerdo con la magnitud de lo que han conseguido y han sobrevivido", explica Jennifer Lewis en su página web.