Las personas con marcapasos están exentas -por ejemplo- de pasar por los arcos de seguridad de los aeropuertos. Y hasta hace poco, también se excluía a los pacientes portadores de desfibriladores implantables o con marcapasos de los escáneres de resonancia magnética en los hospitales. La razón es que los fuertes campos magnéticos y las ondas de radio podían tener influencia negativa en sus dispositivos. Así que nada de hacer pruebas diagnósticas con resonancia para estos pacientes.
Pues bien, la tecnología ha avanzado para permitirles que puedan ser evaluados y valorados de futuras enfermedades con resonancia en cualquier zona anatómica, incluida la torácica.
El Complejo Hospitalario de Vigo (Chuvi) ha realizado la primera intervención en Galicia para implantar dispositivos cardiacos "DX" de compatibilidad avanzada con técnicas diagnósticas de resonancia magnética. Esto es, un marcapasos que sí tolera las resonancias.
La Unidad de arritmias del hospital Meixoeiro -donde se instalan más de 500 desfibriladores y marcapasos al año- acaba de realizar el primer implante con este modelo de compatibilidad avanzada (desfibrilador DX de la gama Ilesto) a un paciente con afecciones cardiacas que necesitaba de la terapia de un desfibrilador implantable. El paciente ya podrá realizar resonancias magnéticas adicionales de cuerpo completo y de alta intensidad (3.0 Tesla) bajo ciertas condiciones, lo que supone un importante avance para el diagnóstico de posibles enfermedades.
Esta prueba por imagen sirve para obtener información en el diagnóstico de tumores, accidentes cerebrovasculares y otras enfermedades relacionadas con los tejidos blandos.
Desde el año 2000 se ha duplicado el número de este tipo de procedimientos en España. En 2006 se realizaron casi 30 millones de resonancias magnéticas en todo el mundo.
