La periodista Pilar Urbano ha pedido, en una carta remitida a los medios de comunicación, que se deje juzgar al lector por si mismo sobre su último libro "La gran desmemoria. Lo que Suárez olvidó y el Rey prefiere no recordar", "sin ofuscarle con prevenciones" antes de que haya podido leerlo.

Sobre la información incluida en su libro, asegura que está contrastada con al menos tres fuentes y basada en acontecimientos que ella misma presenció y en "largas conversaciones con protagonistas o testigos directos, corroboradas por terceras personas, incluso por escrito".

"En el empleo de datos, fechas o lugares y en la reconstrucción de escenas y diálogos, me he ceñido fidelísimamente a la verdad histórica, sin ceder a hipótesis verosímiles pero inciertas", asegura.

Urbano aprovecha la misiva para "aclarar inequívocamente y de una vez por todas", que en "ningún momento" ha escrito que el Rey estuviera detrás del golpe de Estado, ni que formase parte de trama alguna orientada a desviarle de su papel constitucional; ni que Suárez hubiera cometido la más mínima deslealtad hacia la Corona, sino "todo lo contrario y en toda ocasión", asevera.

Por último, dice que el remedio para dejar de discutir la autenticidad de las fuentes "es bien simple: la desclasificación de los documentos oficiales, cantera legítima para quienes queremos historiar nuestro pasado reciente, sin hermetismos y opacidades", concluye.