Kenneth Seddon, que ocupa el número 69 en el Top 100 de químicos del mundo, por delante incluso de Premios Nobel, es uno de los ponentes del XIX Congreso Galego-Portugués de Química que se celebra en el Museo del Mar de Galicia de Vigo desde hoy y hasta el viernes, Día de la Química. Este encuentro tiene como objetivos servir de foro de debate para tratar los temas que preocupan a la profesión y para intercambiar experiencias con otros investigadores, según Antonio Macho, decano del Colegio de Químicos de Galicia, entidad organizadora.

-¿Cuál es el nivel de Galicia en investigación química?

-Las universidades gallegas estamos antes del número 200 de la lista de las 500 mejores del mundo, lo que es importante. Quizá, por ponerle alguna pega, debería de existir más coordinación entre las universidades para no duplicar esfuerzos. Pero la investigación es buena. En Santiago tenemos el área de ciencias de la salud; y en Vigo se está trabajando en varias líneas de investigación, entre ellas, las toxinas marinas y las nanopartículas o nanotubos. No olvidemos que en Vigo había un investigador importantísimo que ha sido captado por otra universidad, que es Luis Liz-Marzán, y en Santiago está José Luis Mascareñas, que participa en este congreso, y que ha sido galardonado con un premio muy importante en el mundo de la química. Pero los químicos también estamos en empresas, en el proceso de depuración del agua, en la regeneración del suelo arrasado por un incendio, en la eliminación del CO2... Estamos en muchas áreas, aunque probablemente el problema que tengamos es que no sabemos transmitir lo que hacemos.

-¿Les preocupa que la crisis pueda suponer un retroceso?

-Mucho y ojalá no nos pase lo mismo que a Gran Bretaña hace veinte años, cuando los gobiernos de Thatcher redujeron los presupuestos para investigación y desarrollo pensando que era la forma de salir de la crisis y que no iba a repercutir en la economía. Ahora están viendo que han perdido el liderazgo que tenían en patentes, que es una forma como otra de medir el nivel de investigación de un país, y que hoy los número uno son los que entonces estaban en escalones inferiores. Esto quiere decir que cuando se hace recorte en I+D+i los efectos no son inmediatos, sino a medio y largo plazo. Y a largo plazo es cuando nosotros percibiremos nuestro atraso tecnológico y ya no habrá vuelta atrás.

-¿Por qué se oponen a la Ley de Servicios Profesionales que pretende aprobar el Gobierno?

-Es una ley que no contenta a nadie. ¿Por qué? Porque nos ignora como profesión. El hecho de que una profesión no sea de colegiación obligatoria supone que no existe esa reserva de actividad, que no existe una actividad específica para los químicos, con lo cual es nuestra puntilla de muerte. Nos deja desprotegidos ante el intrusismo.

-¿Por qué?

-Porque cualquier persona que acredite tener conocimientos químicos va a trabajar en el mundo de la química. Por lo tanto, la profesión química desaparecerá. Y si cualquiera puede trabajar en química, ¿para qué vamos a estudiar química? Estudio otra especialidad que tenga una asignatura de química y ya puedo hablar de química. Y luego, otra cosa importante también, que los colegios al no ser de colegiación obligatoria, pierden la representación exclusiva de la profesión. Por lo tanto, la profesión perderá una voz ante las administraciones y ante la sociedad.

-Han presentado alegaciones. ¿Cree que se tendrán en cuenta?

-El Gobierno quiere sacarla adelante antes de que acabe el año, por lo que en los próximos meses nos jugamos nuestro futuro. El anteproyecto se elaboró sin contar con los colegios profesionales. Nosotros, como colegio de Galicia, hemos presentado alegaciones y luego se han unificado las de todos los colegios de España para decirle al Ministerio de Economía que nosotros somos importantes, que prestamos un servicio a la sociedad. El Ministerio de Economía habla de una transposición en la directiva europea, pero entendemos que una cosa es regular y otra la liberalización de servicios para, dicen, facilitar el empleo. Pero nos encontramos con que los de fuera podrán trabajar aquí sin necesidad de colegiarse y si yo quiero ir a Portugal me tengo que colegiar y además me tienen ellos que autorizar porque en enero aprobaron una ley asociaciones profesionales, la cual no solo da más autoridad a los colegios, sino que se les considera autoridad competente reguladora, es decir, que son los únicos que pueden decir quién puede y quién no ejercer la profesion. Y esto es un auténtica incongruencia.

Este XIX Congreso Galego-Portugués de Química contará con dos expertos de talla mundial como ponentes en el mini-simposio de Líquidos Iónicos que incluye, Tom Welton, profesor del Imperial College London, que abrirá el encuentro, y Kenneth Seddon, de la Queen's University de Belfast, considerado uno de los cien mejores químicos del mundo y también la primera autoridad mundial en líquidos iónicos, productos que se usan como vehículos de otras sustancias y de otros productos. Seddon cerrará con su intervención el congreso, el próximo viernes. "Es la primera vez que organizamos dentro del encuentro un simposio, pero el tema es lo suficientemente interesante", afirma el decano de los quìmicos de Galicia, Antonio Macho.

El encuentro, que reunirá a unos 150 expertos de los ámbitos de la sanidad, la universidad y la empresa, contará también con la participación del catedrático de Química Orgánica de la Universidad de Santiago de Compostela (USC) José Luis Mascareñas, cuyo proyecto, "Merbiocat", ha sido merecedor de la prestigiosa beca ERC Advanced Grant.