El libreto de Manuel Rey Posse y Juan Buhigas Olavarrieta narra una historia de amor entre dos jóvenes hijos de campesinos, Xan y Marica, ella rica, liberada de los foros, y él pobre. Este amor no es en principio bien visto por los padres de ella, que prefieren que se case con Pedro "O Vinculeiro", el cacique que, aunque malhumorado y feo, posee mucho dinero. Finalmente, los padres de ella advierten el amor verdadero entre los jóvenes y acceden a su boda. Toda la acción se desarrolla a los pies del castillo de Montelongo que posee, según la leyenda, una historia similar ocurrida en el pasado: la mora raptada por el rey cristiano y obligada a ser a su mujer, estando enamorada de un moro que le correspondía.

Lo más representativo de esta zarzuela es su autoría cien por cien gallega: la música para Orquesta Sinfónica del maestro Bernardo del Río (Villagarcía), el libreto en gallego de los autores Pose y Buhigas (ambos de Villagarcía ) y la temática popular gallega. "Esta y otras zarzuelas escritas en gallego fueron el refugio de las Irmandades da Fala que, desde sus coros, hacían una defensa de la cultura gallega", destaca el musicólogo Javier Jurado, autor de la única tesis doctoral que existe sobre este fenómeno.

El experto advierte que el objetivo de este regreso a los escenarios de la zarzuela en gallego tiene, además del peso emotivo y cultural, un componente educativo y reivindicativo. "Hay mucha gente que desconoce estas zarzuelas escritas en gallego que abordan temas como la reivindicación nacionalista frente al centralismo o la redención de los foros campesinos; el texto incluye giros idiomáticos propios y refranes gallegos; las señas de identidad en la obra son indiscutibles", apunta el musicólogo.

De hecho, para que nadie se pierda ningún detalle, han elaborado un librillo que se entregará antes de la representación, en el que se explica al espectador el contexto en el que fue creada la obra y la temática.

"La evolución del género de la zarzuela gallega es paralela a la del pensamiento galleguista", expone Jurado, que admira cómo en plena dictadura de Primo de Rivera, cuando se prohibieron las manifestaciones culturales no castellanas, la zarzuela sobrevivió por su gran aceptación".