Con solo seis céntimos al año pagados por cada gallego se podría hacer frente a los daños causados por los lobos en la ganadería sin necesidad de acudir a las batidas. Este es el argumento que lanzan los miembros de la Sociedade Galega de Historia Natural (SGHN) para exigir el fin de las batidas del lobo ibérico en Galicia que, actualmente, se permiten cuando hay repetidos daños al ganado provocados por sus ataques.

Los miembros de esta asociación científica solicitaron a la Dirección Xeral de Conservación da Natureza una relación detallada del número de animales atacados y el importe económico que suponen para los ganaderos. El número de expedientes ronda los 500 al año lo que supone unas compensaciones medias de 170.000 euros. "Entendemos que estas cifras son insostenibles para que hagan frente a ellas los ganaderos, pero si lo pagásemos entre todos los gallegos (2.800.000) sería una cantidad insignificante, seis céntimos de euro, y no sería necesario abatir a los lobos que son una especie emblemática de Galicia", argumenta Serafín González, presidente de la SGHN. "Del mismo modo que entre todos los gallegos pagamos la protección del patrimonio cultural, como es la catedral de Santiago, ¿por qué no hacemos lo mismo con el patrimonio natural y más aún con una de sus joyas, que son los lobos ibéricos?, pregunta.

Además, la sociedad se queja de que la consellería de Medio Rural no aporte datos sobre el censo de los lobos en Galicia –"ni siquiera aproximado"– lo que, en su opinión , "agrava aún más la situación". Les dicen que "mantienen un número importante", "pero sabemos que los ejemplares están disminuyendo; en Galicia no tiene estatus de especie protegida y no queremos que llegue a una situación delicadísima como sufre en otras zonas de España", apuntan.

En 2011 se autorizaron 15 batidas en las que se mataron a 5 lobos. "Se autorizaron incluso en la época de cría", lamenta el presidente. Estos datos les llevan a desconfiar de que la población mantenga "un número importante", como les aseguran desde la consellería. "Si fuera así, es extraño que solo consiguieran matar cinco lobos", justifica. También les parece extraño que si realmente es elevada la manada "cómo es posible que un perro no fuese devorado y consiguiese cruzarse con los logos y dar lugar a un supuesto híbrido en el Barbanza y, además, consiguiese desplazar totalmente a los lobos "puros" de la zona", tal y como el equipo de Conservación da Natureza de la Xunta asegura.